En el nuevo período de programación del Mecanismo Financiero Noruego para 2014–2021 se han asignado más de 25 millones de euros para mejorar las condiciones carcelarias, aumentar la capacitación de los empleados del sector y reintegrar a los reclusos a la sociedad. Algunos de los principales objetivos planteados para los próximos años son la construcción de una prisión piloto con un centro de formación y la creación de unidades transitorias para la adaptación de los presos cuya liberación es inminente. Otros objetivos del nuevo período de programación son el desarrollo de un concepto para la formación inicial y continua de los funcionarios de libertad condicional, el estudio de la posibilidad de introducir nuevas medidas alternativas al encarcelamiento y el diseño de un programa especializado de asesoramiento (coaching).