El debate público para discutir el proyecto de ley para ratificar la Convención de Estambul en el Consejo de Europa sobre la prevención y la lucha contra la violencia de género y doméstica, organizado por la presidenta del Parlamento, Tveta Karayancheva, transcurrió con un choque de puntos de vista opuestos, sin que ninguna de las partes cambiara el suyo. Participaron en el debate diputados, representantes del Ejecutivo y de ONGs, importantes confesiones religiosas y diversos expertos. Antes de ello, el documento desató también la división en el parlamento. El partido GERB lo defiende firmemente, mientras que Patriotas Unidos y el Partido Socialista están en contra. Según quieres se oponen al Convenio, éste llevará a la introducción en la legislación de la llamada “ideología de género”, una difuminación del concepto de género con la introducción de una definición con una base social en vez de biológica, y sentará las bases para solicitar el reconocimiento del llamado “tercer género” y matrimonios del mismo sexo.