Hoy, 2 de noviembre, es el Gran Día de los Muertos, uno de los tres de estas características en el transcurso del año, en el cual son recordados los desvelos de los ángeles divinos por las almas de los difuntos. Según la tradición ortodoxa el sábado es jornada para rememorar a los muertos. Este día se dedica asimismo a los soldados muertos. En los templos cristianos ortodoxos se ofician este día sendas misas fúnebres por las personas muertas. Los parientes y familiares de los muertos adornan con flores e inciensan las tumbas de sus seres queridos. En el pasado la mujer más anciana de la familia solía verter vino tinto sobre la tumba. La vela prendida sobre la tumba de los difuntos simboliza la fe en tanto que la llama nos recuerda la inmortalidad de las almas.