Destacadas figuras de la literatura contemporánea búlgara a nivel europeo y mundial

En la segunda mitad del siglo XX el tesoro literario búlgaro es enriquecido por la narrativa de Dimitar Talev, Dimitar Dimov, Svoboda Bachvarova y la poesía de Elisaveta Bagriana, Dora Gabe, Lyubomir Levchev, Damián Damianov, etc.
Destacada figura de la literatura búlgara del siglo XX es Emilián Stanev, un clásico conocido por sus cuentos e historias de animales. Gracias a la traducción de sus obras en Europa, en Asia y en América Latina, y a la difusión de las películas que se inspiran en sus novelas (“El ladrón de melocotones”, “La Reina de Turnovo”, etc.), Emilián Stanev contribuye al diálogo intercultural de diferentes pueblos y civilizaciones.
Antón Donchev es el gran maestro del género épico que disfruta de popularidad internacional. Donchev fue propuesto al Premio Nobel de literatura por la Academia Búlgara. Sus libros son traducidos a más de 30 idiomas. Su obra más importante, “Tiempo dividido”, fue llevada a la pantalla grande bajo el título “Tiempo de violencia”. El filme es un éxito de taquilla nacional, además, es aclamado en Europa y en EEUU.
El originalísimo escritor Nikolay Jaitov que ha dejado una gran herencia en casi todos los géneros, es mundialmente conocido por sus cuentos, que no tienen parangón en nuestras letras. Su famoso libro "Naracciones salvajes" está traducido a 28 idiomas, entre ellos, el chino, y está incluido en la Colección histórica de la UNESCO.
Jaitov es autor de unos interesantes apuntes de viaje, “Notas peruanas”, que publicó tras su visita a ese país en 1974. El ha filmado también muchos guiones de cine que se inspiran en sus cuentos. Entre ellos está el de la película “Cuerno de cabra”, mejor argumental búlgaro de toda la historia del cine nacional, exhibido en unos 40 países.
Un emblemático exponente de la literatura búlgara moderna es Yordán Radíchkov, escritor para quien las normas de la narrativa perdieron su papel tradicional. Radíchkov es padre de criaturas sobrenaturales salidas directamente de su imaginación o tomadas de prestado del folklore nacional.
Escribió también varios libros de niños aclamados en el país e internacionalmente. Por sus “Historias pequeñas de ranas” ganó el Premio Hans Christian Andersen para literatura infantil. Sus obras dramatúrgicas son puestas en escena en muchos teatros europeos y en los Estados Unidos.
“La vida es una hermosa frase llena de faltas de ortografía”, decía Radíchkov, portador de prestigiosos premios nacionales y extranjeros. Sus libros son editados en 50 países. Fue nominado dos veces al Premio Nobel de Literatura.
Radíchkov fue guionista en el Estudio Nacional de Cinematografía. En 1968 fue detenido por las autoridades por rodar una película inspirada en su cuento “El balón cautivo”. Según la censura, la obra atentaba gravemente contra la dignidad del pueblo búlgaro. El cuento fue prohibido, y la película, retirada de las salas después de su primera proyección.
Vera Mutafchieva es una de las figuras intelectuales búlgaras más importantes, autora amada por los lectores de varias generaciones. Tiene en su haber más de 30 novelas, traducidas a muchos idiomas.
Entre sus obras más famosas están las novelas "Los últimos Shishmán", "El libro de Sofroni", "Yo, Anna Comnin". Uno de los libros más leídos y vendidos de la escritora es "El caso Cem", que narra la historia del príncipe Cem, el hermano del sultán turco Beyazid II. En sus años póstumos, ya enferma, Vera Mutafchieva confió a una discípula suya que Cem fue el hombre de su vida, el que le había traído más suerte, y pidió a aquélla que dejara un anillo en la tumba del principe en Bursa, a modo de símbolo.
Particularmente interesante es un ensayo de la autora titulado "El duende y el kef". En él Vera Mutafchieva compara las diferentes formas de "éxtasis" en la cultura española y la balcánica. Mutafchieva escribió también el guión de la película búlgara más vista de todos los tiempos, "La gloria del Can”.
Blaga Dimitrova es renombrada escritora, poetisa y crítica literaria búlgara. Su primera novela, “Viaje en mí misma”, autobiográfica en el fondo, genera gran interés porque aborda el tema candente de las condiciones políticas y sociales en Bulgaria en los años 60.
Las dos novelas siguientes, “Desviación” y “Avalancha”, al principio censuradas pero publicadas a finales de los años 70, se vuelven tan populares en los ámbitos culturales de Bulgaria que son adaptadas como guiones cinematográficos. Los filmes cosechan éxitos en los festivales de cine en Bulgaria y en el extranjero.
Uno de los mejores trabajos de Blaga Dimitrova es su novela “Semblante” escrita en 1977. El libro contiene una crítica directa al régimen comunista búlgaro. Lanzado a finales de 1981 consiguió éxito inmediato, pero fue retirado de circulación y todos los 300,000 ejemplares fueron llevados a un depósito especial para libros prohibidos.
En la época actual resaltan los nombres de Viktor Paskov, Georgi Gospodinov, Alek Popov, entre otros.
El polifacético Viktor Paskov además de escritor fue músico, musicólogo y guionista de cine. Sus primeros poemas se publicaron en la década de los 70 y el primero de sus seis libros apareció en 1986. Al año siguiente en el mercado literario salió la novela que se considera su obra más lograda, “Balada para Georg Henig”. Basándose en sus propias experiencias, Paskov relata la miserable suerte de un exiliado luthier checo en Sofía en los primeros días del régimen comunista.
En 1987 “Balada para Georg Henig” ganó el premio a la mejor obra extranjera en la Feria de Libros de Burdeos, siendo publicada en el Reino Unido, EEUU, Alemania, España, Polonia, Rusia, la República Checa, Eslovaquia y Suiza.
Georgi Gospodinov es uno de los autores “faros” de la joven generación de escritores búlgaros. Es autor de una novela y múltiples narraciones breves, es poeta, dramaturgo y crítico literario. Su primera novela, “Novela natural”, publicada en 1999, por su estructura postmoderna recuerda, según los críticos, a Borges y Pessoa. La novela fue traducida a diez idiomas y dio a conocer al autor al público internacional.
Como dramaturgo, Gospodinov ha sido galardonado con el premio a la Mejor Obra Teatral del año 2004 por su pieza “DJ” (las iniciales de Don Juan). La obra fue puesta en escena también en Francia y Austria.
Alek Popov es uno de los escritores jóvenes más populares en Bulgaria con amplios intereses creativos. Publicó su primera colección de cuentos, “La otra muerte”, en 1992. Su primera novela, “Misión: Londres”, lanzada en 2001, ha sido ampliamente aclamada como "el libro búlgaro contemporáneo más divertido" por la lograda imagen sarcástica de la elite diplomática búlgara.
Alek Popov es laureado de varios premios literarios, entre ellos: el premio al mejor relato corto criminal de la Radio Nacional, el Premio Gravitón, distinción búlgara que se otorga a la mejor obra del género “ciencia ficción”, el Premio Helicón por el mejor libro en prosa, y más recientemente, del Premio Nacional de Teatro “Iván Radoev”.
Los relatos cortos de Alek Popov están traducidos a una decena de idiomas. Su novela “Misión: Londres” está publicada en serbio, húngaro y francés. Recientemente terminó el rodaje de la película homónima que se basa en esta obra.
Los dos siguientes representantes de las bellas letras no forman parte del contexto literario búlgaro pero sí del nacional ya que ambos nacieron en Bulgaria donde transcurrió su infancia. Ellos son: Elias Canetti, Premio Nobel de Literatura de 1981, e Ilija Trojanow, laureado de numerosas distinciones, entre las que está el prestigioso Premio Adelbert von Chamisso.
Tanto Canetti como Ilija Trojanow pertenecen a una singular raza de escritores: los que eligen como patria una lengua literaria ajena a la nativa. Ellos escriben, y con gran éxito, en alemán, aunque no es su lengua materna.

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