Unos diez nuevos sitios de hospedaje recibirán la distinción “Casa Verde”, por haber aplicado buenas prácticas en el turismo. Con esto las casas verdes en Bulgaria ya serán 30 y conforman una especie de circuito de direcciones de hospitalidad, red que cubre algunos de los rincones más pintorescos del país.
La marca de calidad concedida por la Asociación Búlgara de Turismo Alternativo (BAAT) es una garantía de que usted se verá en un entorno auténtico y que su estancia ejercerá una incidencia mínima sobre la naturaleza circundante.

Los dueños de las casas verdes ofrecen a sus huéspedes la posibilidad de conocer la naturaleza y las maneras de preservarla.

La marca “Casa Verde” es bien conocida en Europa y demandada por un número cada vez mayor de turistas que aprecian la naturaleza y aprovechan su viaje para conocerla mejor. La visita a una casa verde es una manera de conocer el modo de vida y las tradiciones de las comunidades locales. La norma ha sido diseñada por la Asociación Búlgara de Turismo Alternativo y se ajusta a los criterios del Centro Europeo de Turismo Ecológico y Agrario.
Para obtener la marca de prestigio, los propietarios de los sitios de hospedaje deben demostrar que cuidan y atienden no sólo a los clientes sino también al medio ambiente. Entre los requisitos figuran el aprovechamiento eficiente de los recursos de energía, la oferta de alimentos ecológicamente puros, la gestión óptima de los residuos, la preservación de la arquitectura local y del patrimonio histórico cultural de la región, etc.
Hace poco, dos casas de huéspedes del pueblo montañoso de Zheravna superaron con todo éxito el examen de los expertos de la Asociación Búlgara de Turismo Alternativo y se disponen a unirse a la red ecológica “Casa Verde”. Toshko Starev, dueño de la Casa de Ruzha, lleva años dando hospedaje a partidarios de la vida amigable con la naturaleza. Su hotelito cubre la mayor parte de los criterios planteados por la asociación.

Uno de las miembros más recientes de la familia “Casa Verde” es la casa de Ruzha, de Zheravna.

“El problema es que no podemos montar paneles solares en el techo, porque a Zheravna se le ha declarado reserva arquitectónica y toda injerencia en el aspecto exterior de las casas está prohibida por la ley”, dice Toshko Starev, y agrega:
“Por lo demás, cumplimos con los llamamientos a ahorrar energía. Con este fin usamos bombillas que ahorran energía. Hemos montado duchas económicas especialmente regulables. Usamos cocinas con hornillas de cerámica. Recogemos el agua usada para regar el jardín, etc. La propia casa es de mampostería y está bien aislada térmicamente. El techo es de dos aguas y protege bien contra la nieve, el viento y el sol. Durante el verano no hace falta aire acondicionado: dentro hace fresco”.

La mayoría de las casas verdes de Bulgaria tienen un estilo arquitectónico antiguo y ofrecen un ambiente autóctono, tranquilidad y romanticismo.

A la red “Casa Verde” se ha sumado un pequeño complejo hotelero de la montañosa ciudad de Panaguiurishte. Sus propietarios han procurado atenerse al máximo a las normas ecológicas. Las lámparas de alumbrado de toda la casa funcionan a base de fotocélulas. El agua se calienta por paneles solares. Las calderas de vapor, que aseguran la calefacción de los distintos recintos, funcionan a base de combustión de madera residual tratada. En la casa se practica la recogida selectiva de los desechos, se utilizan detergentes biodegradables y los huéspedes que llegan en transporte público obtienen un descuento del precio del hospedaje.

Radina Petrishka, dueña de la casa de Dzhudzho en Panaguiurishte, refiere:
“Ofrecemos paseos en bicicleta hasta la célebre ciudad renacentista de Koprivshtitsa o hasta el centro histórico de los antiguos tracios, Starosel. En nuestro monte, Sredna Gora, la naturaleza está conservada, hay grandes pinares y veredas para hacer senderismo. Podemos organizar una observación de la recogida de los pétalos de rosa oleaginosa en los alrededores de nuestra ciudad y visitas al alambique de esencia de esta fragante flor”.

Los nuevos certificados ”Casa Verde” serán entregados en Sofía a mediados de abril, por la Asociación Búlgara de Turismo Alternativo.

Versión en español de Venceslav Nikolov

Fotos: Veneta Nikólova