Aumenta la venta de productos biológicos en Bulgaria

Publicado el 19/08/10 11:46

El pan de “trigo de los tracios”.

Foto: Tania Harizánova

¿Se acuerdan del aroma y de los sabores de la infancia y del pasado? ¿Del pan recién asado que las manos de una abuela amasaron con mucho cariño de la harina preparada en el vecino molino? El ritmo apresurado de la vida nos privó de estos recuerdos pero llegó la hora de sentir de nuevo los aromas de nuestra infancia. ¿Cómo? A través de los productos biológicos. Su variedad no deja de crecer. Empezando por los cereales de los tracios, o sea el trigo más rico en proteínas, y llegando al vino biológico, al aceite de rosa oleaginosa o los cosméticos biológicos. ¿Son los productos biológicos una moda o una necesidad?
“No es ni una moda, ni una necesidad, es una evolución de la conciencia humana”, dice el joven empresario, Svilen Klasanov, propietario de una panadería, de un restaurante vegetariano y de una tienda de alimentos biológicamente puros. Es una etapa del desarrollo de la humanidad, el momento en el cual la gente se da cuenta de la importancia de los alimentos que consume. Este fenómeno sucede a nivel mundial, todos lo experimentan y se dan cuenta de ello”.
El mayor productor de alimentos biológicos es Europa. Según datos de la Comisión Europea, el mercado de productos biológicos tiene una facturación de 5 mil millones de euros. La producción se comercializa más que nada en el seno de la UE. Los más importantes consumidores son Alemania y los países escandinavos. Los productos de origen vegetal ocupan el 65% de la producción total de alimentos biológicamente puros y su consumo llega al 10-15%.
¿Qué lugar ocupa Bulgaria en esta clasificación? A pesar de la crisis, en Bulgaria van creciendo la producción y el comercio de productos biológicos. El consumo en Bulgaria todavía está reducido, está por debajo del 1%, pero el boom está por realizarse. 400 granjeros búlgaros se dedican a la agricultura biológica, el 80% de ellos se ha orientado al cultivo de vegetales. Casi toda la producción, sin embargo, es exportada al Oeste de Europa. Han aumentado dos veces las empresas especializadas en la importación y la distribución de productos biológicos durante el último año y medio. La variedad de los alimentos biológicos ha crecido de 1400 a 2600 especies. Las tiendas especializadas en comercio de alimentos biológicos registran un crecimiento de las ventas de dos dígitos. Si bien los precios de estos productos son más altos, crece el número de los consumidores que buscan este tipo de alimentos.
“Los representantes del gremio informan que aumenta considerablemente la demanda por parte de los consumidores”, comenta Svilen Klasanov. “Los ciudadanos ya “despertaron” y prefieren alimentos naturales y puros, evaden los productos de los supermercados llenos de conservantes y estabilizantes que forman parte de la tabla periódica de Mendeleiev”.
El fuerte interés originó una nieva oleada en el mercado: la creación de cadenas de tiendas de productos biológicos. Ya son un hecho los primeros restaurantes que atraen a los clientes con una carta integrada únicamente de productos biológicos. Los especialistas del gremio afirman que este tipo de restaurantes irán aumentando a ritmos acelerados.
“Nuestra misión es familiarizar a las personas modernas con el modo de alimentarse natural y con el modo de vida amigable con el medio ambiente”, dice Svilen Klasanov refiriéndose al restaurante vegetariano en el cual utiliza sólo productos biológicos de alta calidad. “Vivir en armonía con la naturaleza es de importancia esencial ya que todo el medio ambiente que nos rodea sufre las consecuencias de la actividad humana y de la urbanización. Deseamos mostrar que se puede vivir con menos comida que sea de mayor calidad”.
La panadería de Svilen ha cobrado fama por el sabroso pan integral preparado allí. La humanidad conoce la tecnología de moler el trigo entre dos piedras desde hace milenios. Cuando el trigo es molido más lentamente se conservan las vitaminas, los enzimas y los minerales que contiene. El joven empresario utiliza variedades antiguas de trigo, como “el trigo de los tracios”, y los muele en un molino de piedra agregando levadura a la harina obtenida. “El molino de piedra es la única manera de obtener una harina auténtica”, dice Svilen. El pan preparado de este tipo de harina tiene una textura fuerte, no se reduce a migajas y se puede conservar una semana.
“La elaboración requiere mucho trabajo”, dice Svilen Klasanov con satisfacción. “Hacer pan desde el cero es un proceso bastante largo. Asegurar el trigo, procesarlo en el molino de piedra, amasarlo con levadura y asar el pan... este proceso es auténtico, garantiza la calidad del pan que es natural y no contiene ningunos conservantes. Sí, es muy difícil pero el pan que ofrecemos tiene sabor y calidad excelentes”.

Versión al español de Hristina Táseva

По публикацията работи: Tania Harizánova

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