Después de la invasión norteamericana en 2003 y la caída de Sadam Husein, Irak no pudo recuperar la seguridad en las grandes ciudades. El Gobierno de Bagdad, que domina casi todas las provincias de Sadam Husein, cometió múltiples errores respecto de las minorías y la población mayoritariamente sunita.

En las provincias que quedaron leales a Sadam y opositoras al Gobierno, surgieron brotes de venganza, represalias, contradicciones. En 2012, en las provincias occidentales, sobre todo en Ambar, los sunitas iniciaron una rebelión contra el Gobierno de Nuri al Maliki quien se vio obligado a dimitir del puesto de primer ministro debido a los acontecimientos en torno al grupo Estado Islámico. Los errores de al Maliki, de 2006 a esta parte, movieron a algunos analistas a considerar que la desigualdad y las represalias son catalizadoras para los grupos radicales. 

Entre las organizaciones extremistas surgidas después de 2003, dominadas por Al Qaeda, llama la atención el grupo Estado Islámico de Irak (EIL), originada como una rama de Al Qaeda pero con un nombre cambiado, Estado Islámico para Irak y Levante (EIIL) después de que su líder Abu Bakr al-Baghdadi viera la posibilidad de expansión hacia Siria en el caos de la guerra civil.

De agosto a esta parte, las fuerzas curdas del Kurdistán iraquí, los Peshmerga, defienden la línea del frente en Kirkuk, Gwer y Mahmur. Sufren escasez de armas y apoyo internacional que les ayuden a expulsar a los combatientes del Estado Islámico de Mosul, la segunda mayor ciudad de Irak, que había caído. El Estado Islámico cogió fuerzas justamente de Mosul porque grandes cantidades de dinero y armas, utilizados por el ejército iraquí, cayeron en manos del grupo. Hasta el momento, las unidades curdas son las fuerzas combatientes más activas que se interponen en el camino del Estado Islámico en Irak.

Los periodistas Ruslan Trad y Georgi Totev estuvieron en la línea del frente en Gwer y en Mahmur para obtener información de primera mano sobre los acontecimientos.

¿Cuál es la situación real? Cómo repercute el flujo de refugiados sobre la seguridad de Kudistán? El periodista Ruslan Trad responde en una entrevista a Radio Bulgaria:

“En la ciudad iraquí de Erbil el conflicto no se siente, pero cuando sales del centro se ven los primeros puestos de seguridad y es evidente que han sido tomadas medidas de seguridad reforzada. El centro de la ciudad es un corazón palpitante. Los curdos desean convertir Erbil en una ciudad moderna que sea un verdadero centro del futuro Estado de Kurdistán Iraquí. Erbil es centro de muchas empresas internacionales.  En el corazón de la ciudad, la tensión no se siente, pero es obvia solo a unos cuantos kilómetros de allí. En las afueras hay tres frentes a diferente distancia el uno al otro. El frente más cercano está en dirección a Mosul, donde pasamos la noche junto con los peshmerga. Estuvimos en Majmur y en Zumar Abdallah, a 50 kilómetros de Mosul, que es un aunténtico frente”.

Según tu opinión, ¿rinde resultados la campaña de las fuerzas gubernamentales contra el Estado Islámico (EIIL)?

“En las conversaciones que tuvimos con los comandantes de los peshmerga, incluso cuando estuvimos en la línea del frente y pasamos toda la noche con ellos, quedó claro que ellos confían de su éxito, sin embargo la lucha es muy difícil. Según ellos, sin las fuerzas internacionales en la persona de EEUU y sin los suministros de armas, posiblemente Erbil también fuera afectado por el Estado Islámico. No hay motivos para alegría en este momento porque muchas personas están conscientes de que hoy, el Estado Islámico se ocupa principalmente de Siria, de la ciudad de Kobane, pero que en el momento que logren éxito en Siria, se dirigirán hacia Erbil y Kirkuk donde se libran los enfrentamientos más duros en Irak. Prácticamente hay enfrentamientos continuamente lo cual quiere decir que el Estado Islámico persigue su objetivo de apretar el cerco alrededor de Erbil. Sin embargo, de momento sus fuerzas están dirigidas hacia Siria.

En este sentido, ¿han sido exitosos los ataques aéreos de EEUU? 

“Con toda certeza, los ataques aéreos no son suficientes. En muchos casos se producen en lugares donde no hay nadie, y hay solo graneros vacíos utilizados por el Estado Islámico. Según los peshmerga, debe haber una intervención por tierra o se deben reforzar las fuerzas curdas. Prácticamente tenemos un frente que no se mueve ni al este, ni al oeste hacia Mosul, y gracias únicamente a los ataques aéreos, el Estado Islámico no ha seguido su expansión hacia Erbil”.

Versión en español por Vesela Petrova