Estamos a punto de despedir un año difícil, abundante en acontecimientos inesperados y en cambios. Confinados o simplemente guardando una distancia física de seguridad, aprobando o no las medidas adoptadas contra el virus que sigue siendo igual de desconocido, mucha gente quizás esté pensando en el futuro a la espera de mejores perspectivas.
En cuanto a nosotros, los búlgaros, en festividades o en momentos difíciles, solemos recurrir invariablemente a las costumbres y prácticas rituales remotas. Tal vez de esta manera pretendemos sentir e imbuirnos del espíritu del modo de vida patriarcal, que parece mucho más ordenado en términos del sistema de valores, o probablemente lo hacemos con la ilusión de que los ritos en cuyo poder confiaban nuestros antepasados nos ayuden al menos un poco también a nosotros.
El último día del año saliente, Radio Bulgaria le recuerda las creencias y tradiciones asociadas con el cruce de la frontera entre dos años.
Lo que solían poner los búlgaros de antaño con presencia obligada en la mesa festiva, que ha de ser copiosa y rica, así como otros momentos importantes de la fiesta folklórica están presentados en el escrito “En la linde entre el Año Viejo y el Nuevo” del archivo de Radio Bulgaria.
Cientos de personas vestidas de blanco, ordenadas en un círculo bailando con la mirada puesta en el sol. Cada persona que visite en agosto los Siete Lagos de Rila Esta vista podrá ser testigo de esta inolvidable vista. El rito se denomina..
“Quien quiera ser el primero entre ustedes, que sea siervo de todos". La leyenda cuenta que este era uno de los consejos que san Juan de Rila dirigió al zar Petar, declinando amablemente la invitación de reunirse con él y renunciando a aceptar los..
El día de los santos apóstoles Pedro y Pablo es una fiesta muy venerada por los búlgaros. En la tradición popular del pueblo búlgaro simboliza el auge de la naturaleza y de la vida a principios del verano que en Bulgaria comienza habitualmente a finales..