El 7 de noviembre de 2013 con motivo de otro aniversario más de la Revolución de Octubre de 1917, Guenov y Sárbinska pintaron con aerosol de color rosa el monumento a los guerrilleros antifascistas frente a la sede del Partido Socialista Búlgaro y se les imputó por gamberrismo. En un comienzo fueron absueltos por el Tribunal Regional de Sofía, pero la segunda instancia judicial revocó la resolución y sancionó a cada uno de los dos con sendas multas de 767 euros.