Todos los años el 11 de mayo la Iglesia Cristiana Ortodoxa recuerda la memoria de los santos hermanos Cirilo y Metodio, creadores del alfabeto eslavo, unos de los santos búlgaros más venerados, a los que el pueblo suele llamar los próceres. Muchos templos y monasterios búlgaros llevan los nombres de Cirilo y Metodio y los inconógrafos los han pintado en iconos y murales.

En 1980 el papa Juan Pablo II proclamó ante Dios a los santos Cirilo y Metodio copatronos de Europa, junto con San Benito. Con este motivo él Sumo Pontífice escribió: “Cumpliendo su misión, Cirilo y Metodio dieron un decisivo aporte a la edificación de Europa no solo en el marco de la comunidad religiosa y cristiana, sino también en lo que concierne a la unificación civil y cultural”.
Los hermanos Cirilo y Metodio nacen a comienzos del s.9 en Salónica y según un escrito antiguo su madre era búlgara y el padre - destacado guía militar del gobernador de Salónica. Cirilo se gradúa de la Escuela de Magnáur en Constantinopla, donde debido a sus habilidades extraordinarias es llamado el Filósofo; luego es nombrado Bibliotecario del Patriarcado, la sede del jefe de la iglesia cristiana de Constantinopla. Muy pronto se aleja de la vida mundana y se une a su hermano Metodio en el monasterio donde éste ya era monje.
Es allí donde san Cirilo crea un alfabeto nuevo que refleja con exactitud el sistema fonético del idioma de los eslavos de Salónica. Según la eslavística este idioma es de indudable carácter búlgaro. A petición del príncipe Rostislav en el año 862 el emperador bizantino Miguel III envía a Cirilo y Metodio a Moravia para enseñar el oficio de la misa en la lengua eslava. Su misión ilustradora allí provoca la rabia del clero latino-alemán local y ambos hermanos se dirigen a Roma para buscar la protección del Papa Adriano II de aquel entonces.
A las acusaciones de haber violado el dogma trilingüe, según el cual la misa no se podía oficial más que en hebreo, griego y latín, san Cirilo el Filósofo logra probar que todos los pueblos, los eslavos incluidos, tienen el derecho de glorificar a Dios y de crear su cultura en el idioma nativo. El Papa da su bendición a los libros traducidos por los santos próceres y en algunas iglesias romanas es oficiada una misa en el idioma eslavo, como testimonio de reconocimiento ante el mundo cristiano.
Es una de las numerosas misiones que los santos hermanos realizan con éxito. Más tarde san Cirilo enferma gravemente, toma los hábitos y muere en Roma en el año 869. Se le entierra en el panteón personal del Papa Adriano II, pero más tarde sus restos son trasladados en la basílica San Clemente de Roma, donde descansan en paz hasta hoy día. Su obra de ilustración cristiana es seguidas por su hermano mayor Metodio quien fallece en el año 885.
En 886 los discípulos más abnegados y talentosos de Cirilo y Metodio, a los que la Iglesia cristiana ortodoxa canoniza más tarde también, son recibidos con honores y gozan de la total ayuda del rey búlgaro Boris I. Los más conocidos de ellos: Climent, Naum y Anguelarii, continúan la magna obra histórica de sus maestros. Los libros litúrgicos son traducidos al idioma vivo del pueblo, el búlgaro antiguo, para que se glorifique en él también la vida y obra de Jesucristo. Sobre la base de la literatura eslava más antigua, la literatura creada en búlgaro antiguo, nacen más tarde las literaturas rusa, servia y otras.
Todos los años, el 11 de mayo, en todos los templos búlgaros se oficia una misa especial con cánticos tradicionales que loan a los santos hermanos Cirilo y Metodio y sus discípulos. Además los iconos con sus efigies lucen adornados de coronas de flores primaverales.