La reserva arquitectónica Yailata, una de las curiosidades turísticas más visitadas en la costa norte del mar Negro

Publicado el 23/03/12 15:06

Foto: imagesfrombulgaria.com

Los centros marítimos del mar Negro no necesitan de publicidad. Hace tiempo que son famosos por sus bellas playas y la gran variedad de las diversiones y comodidades que se ofertan allí. Sin embargo, nuestras vivencias turísticas se pueden ampliar si nos sumergimos en la romántica de las curiosidades naturales e históricas que se conservan en la costa del mar Negro. Una de ellas es el cabo Kaliakra que es visitado por unos 500 mil turistas anualmente. El cabo envuelto en leyendas cautiva al viajero con su bella vista hacia la inmensidad marina por lo cual la región se ha afirmado como uno de los emblemas del litoral norte del mar Negro.

No muy lejos de Kaliakra hay una zona que en los últimos años atrae como un imán a turistas búlgaros y extranjeros. Es la reserva arquitectónica Yailata. Un paseo por ese lugar impregnado con el espíritu de la historia antigua puede cargarle a uno con la energía proveniente del mar y con las bellezas de la naturaleza.

”Hasta hace poco Yailata no era una zona conocida entre los turistas de la costa norte del mar Negro, dice Kosta Arguirov, jefe de la dirección Turismo y Desarrollo Económico en el ayuntamiento de Kavarna. Hace dos años participamos en un proyecto encaminado a popularizar sitios de interés turístico poco conocidos. Yailata fue definido como uno de los sitios más interesantes y ocupó el tercer lugar en la clasificación turística nacional. La reserva se encuentra al norte del complejo marítimo Rusalka y solo a dos kilómetros de Kamen Briag. Está situada en una pintoresca colina donde hay macizos de las grutas alcanzan 50-60 metros. Es parte de la Vía Póntica, la ruta migratoria de las aves. Es el lugar predilecto para los ornitólogos que pueden observar 180 especies de aves que anidan allí. El lugar es muy bello hacia finales de abril cuando florecen diferentes especies de flores. Entonces llegan allí muchos turistas interesados en la biología. Otros simplemente desean gozar de la bella alfombra que crean las flores. Durante el verano en el mar se pueden ver muchos delfines porque es un lugar donde nadie los estorba”.

La localidad de Yailata está envuelta en historia milenaria. Allí ha sido descubierta una ciudad de 101 viviendas rupestres que fueron habitadas en el quinto milenio antes de Cristo. En la parte norte de la reserva arquitectónica hay una fortaleza de la temprana época bizantina interesante para los especialistas y los aficionados a la historia y la arqueología. Se conservan parcialmente torres antiguas, así como restos de la antigua puerta de la fortaleza. Se conservan, además, piedras donde se hacían sacrificios, hay restos de una bodega y cuatro túmulos excavados en la tierra.

“Durante la Edad Media estas cavernas fueron utilizadas como un complejo monástico, continúa su narración Kosta Arguirov. En sus paredes se conservan imágenes de runas protobúlgaras, cruces, iconos de piedra. Lamentablemente solo 10 de las cuevas pueden ser visitadas. Con el andar del tiempo rocas cayeron sobre el resto y el acceso a ellas es más difícil. A una altura de 70 metros los aficionados a las bellas vistas pueden abarcar con la mirada toda la localidad de Yailata. Cada año la reserva acoge a unos 50 mil turistas. La región es visitada desde los primeros días de la primavera hasta finales del otoñó cuando llegan allí los grupos organizados de ornitólogos del mundo entero. Su interés está provocado por las aves migratorias que anidan en el tranquilo litoral de la reserva que es una verdadera pieza del paraíso”, termina diciendo Kosta Arguirov.

Versión en español por Hristina Táseva

По публикацията работи: Lina Ivanova

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