Todos los búlgaros llamados Iván dicen que su nombre no es un nombre, sino un título ya que significa Bendición de Dios. El 7 de enero celebran el día de su santo. Para los búlgaros Ivanovden, el Día de Iván, es una de las fiestas más respetadas desde la antigüedad hasta hoy día porque simboliza la fe, el espíritu nacional, el patriotismo y el patrimonio cultural búlgaro. Iván es el nombre del patrono de los búlgaros, San Juan de Rila. Muchos zares búlgaros han divulgado la fama de este nombre: Iván Asen, Iván Shishman, Iván Sratzimir, Iván Alexander… Iván es la versión eslava del nombre Juan. El 7 de enero, la Iglesia Ortodoxa Búlgara conmemora a San Juan Bautista. Juan es el nombre más popular en el mundo cristiano. Lo han llevado 23 Papas, varios reyes de Hungría, Polonia, Portugal, Francia, Rusia, Bulgaria. Mucho antes de la invención de la palabra globalización, la fama de este nombre se había extendido entre varios pueblos: es John en inglés, Jean en francés, Gjon en albanés, Yahya en turco, Ifán en galés, Joao en portugués, Hans en alemán, etc.
Más de 300 mil búlgaros celebran hoy el Día de San Juan. Iván es el segundo nombre más divulgado en nuestro país. 3139 bebés que nacieron en 2013 se asociaron al Club de los Juanes. Si en alguna familia no hay ninguno llamado Iván, habrá un Iván entre sus vecinos o amigos. De esa manera, el 7 de enero, todo el mundo está celebrando en alguna parte. Iván es el nombre más popular en Bulgaria. Hay canciones, ensayos y chistes dedicados a este nombre. “Le tocó a Iván medio millón de la lotería una semana después de su boda,” dice uno a su amigo. “Pobre de él, nunca ha tenido suerte”. De la fama de los que llevan el nombre de Iván se canta en el éxito musical búlgaro Ivane, Ivane, de Bogdana Karadócheva.
“Tantas ganas tienes de ser un Don Juan pero eres Iván nada más”, canta Bogdana Karadócheva. Y continúa amenazadora: “Ivane, Ivane, no naciste con estrella, no ves que te he puesto el anillo…”
El Día de Juan es una fiesta relacionada con la Iglesia búlgara que ha conservado el patrimonio búlgaro, con el nombre del patrono del pueblo búlgaro, San Juan de Rila. Este día evoca la gloria de la Gran Bulgaria, nos hace recordar los nombres de los zares que llevan el nombre de Juan y sus triunfos bélicos. El zar Iván Shishman que dirigió al pueblo en una batalla contra la invasión otomana está descrito en una canción popular que suena como canción de marcha. “Les encabeza, madre mía, el mismísimo zar Iván Shishman…”. Se dice que esta canción es “genuinamente búlgara”, la canción eterna que hace bullir la sangre y enardece los corazones.
“Al amanecer echaron a andar las tropas, madre mía, y siguen andando. Apretadas filas de caballos, espesas filas de héroes. Sus espadas brillan como el sol. Sus lanzas forman un denso bosque. Lucharán por el nombre búlgaro, lucharán por la fe búlgara”.
Por eso en Bulgaria Iván es un título y no un nombre.
Versión en español por Ekaterina Bóbeva
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