En Troyan , ciudad serrana de la Cordillera de los Balcanes, famosa por su aguardiente de ciruelas, fue inaugurado el sábado el 22 festival tradicional de la ciruela. La destilación del aguardiente de ciruela es tradición ya centenaria que  tuvo sus comienzos detrás de los muros del monasterio de Troyan. En la apertura del festival la alcaldesa del  ayuntamiento de Troyan hizo recordar que hace más de 100 años  varios  monjes del monasterio de Troyan habían viajado a  Europa para promocionar el aguardiente de Troyan y luego regresaron a la villa con un  diploma de honor otorgado a esa bebida. El documento  se guarda aún en el monasterio. El obispo Sionio, superior del monasterio dirigió a los asistentes a la apertura del festival palabras en que les deseó bienestar, alegría y paz. Para los visitantes del festival, que continuará el domingo también habrá exhibiciones de oficios tradicionales, degustación de manjares típicos, cata de aguardiente de ciruelas y un variado programa musical y cultural.