Uno de los acontecimientos dedicados al 80º aniversario de Radio Nacional de Bulgaria (RNB) fue una conferencia internacional celebrada ayer en Sofía sobre los desafíos del futuro ante la radio pública. El foro estuvo enfocado en las últimas tendencias del desarrollo de los medios públicos: el contenido del programa, la financiación, la innovación y la regulación en respuesta a las expectativas de la audiencia. Fue invitada especial al aniversario de RNB y de la conferencia Ingrid Deltenre, directora general de la Unión Europea de Radiodifusión (UER).

La Radio Nacional de Bulgaria celebra su 80º aniversario y presume de una posición de liderazgo en el ranking de la confianza pública en los medios de comunicación del país. Sin embargo, seguro hay algo más que desear. ¿Cuáles son sus consejos?

“La Radio Nacional es un medio de comunicación muy importante en la historia de Bulgaria que acompañó a la gente durante generaciones y, a pesar de las vicisitudes del tiempo, logró mantener su posición de líder. La razón de ello es que es una fuente fiable y creíble de información. Espero que la emisora mantenga este logro porque, a pesar de los cambios sociales a lo largo de los años y de la revolución técnica, lo más importante sigue siendo el periodismo independiente que se rige sólo y únicamente por el interés público y no por partidismo político. Además, la radio pública es portadora de la riqueza cultural; un pequeño ejemplo de ello nos mostraron las orquestas y conjuntos de RNB durante el concierto solemne”.

En la conferencia Ud. habló sobre los desafíos ante los medios de comunicación públicos en el mundo digital. El mundo de los medios se está desarrollando de forma muy dinámica y especialmente los operadores públicos tienen dificultades en ganar la atención de la audiencia joven. ¿Cuál es su receta?

“Es muy importante conocer qué es lo que interesa a los jóvenes, de dónde obtienen su información y qué temas atraen su atención. Luego, debemos pensar en la manera de difundir esta información. No en último lugar, los medios públicos deben reorganizarse y adaptar sus programas a este público específico. Internet requiere nuevas formas de presentación del contenido del programa y de la comunicación, requiere también modernizar los procesos en el seno del medio de comunicación y, quizás, inclusive la mentalidad”.

En el mundo digital, la celeridad tiene a menudo importancia decisiva. ¿Queda tiempo para investigaciones y análisis periodísticos profundos, que son la marca registrada de los medios públicos?

“Hay que aprender a combinar las dos cosas. La celeridad es parte de nuestro trabajo, lo cual no significa abandonar la exactitud de la información presentada o el análisis profundo, porque nuestra labor no termina con citar a tal o cual fuente de información dejando la estimación de los hechos al oyente. Para ello, sin embargo, se requieren tanto competencias específicas como financiación. Es por esto que la financiación de los operadores públicos es un tema sensible. Me sorprendió saber que los medios comerciales en Bulgaria tienen presupuestos que casi duplican el de la Radio y la Televisión públicas. Obviamente, el legislador debe intervenir para proteger a los medios públicos”.

Ud. se reunió con la presidenta del Parlamento, Tsetska Tsácheva, y con el primer ministro, Boiko Borísov. ¿Cómo ven ellos este problema?

“Tengo la impresión de que están conscientes de que los medios de comunicación públicos no están financiados en grado suficiente, aunque, en realidad, es una tarea difícil en tiempos de crisis cuando todos tienen que apretar el cinturón. Por eso pensamos que la alternativa es una reforma de la legislación para que los medios públicos puedan aprovecharse de oportunidades comerciales más amplias como fuente de financiación”.

Versión en español por Daniela Radíchkova