Desde “¡Hosanna!” hasta “¡Crucificadle!”: así han sido las reacciones a la aparición de Emil Conrad en el mundo de los escritores. Su primer libro, “Las cosas que no nos enseñaron en la escuela”,le ha asegurado un buen arranque como escritor, conocido hasta el momento como creador de video blogs, populares principalmente entre los adolescentes, y le ha situado en el foco de la atención de los medios de comunicación.

¿Con qué ha conseguido Emil Conrad atraer la atención de la sociedad?

En primer lugar, con crear un precedente en la distribución nacional de libros. Difícilmente podemos recordar otra ocasión en la que la aparición de un nuevo libro haya hecho que los lectores búlgaros hagan colas para conseguir el libro y un autógrafo. Semejante fenómeno de hacer colas durante largas horas nos hace recordar más bien otros tiempos cuando había escasez de productos de primera necesidad. Así que la cola de centenares de jóvenes que serpenteaba frente a una librería en Sofía, donde se celebró el estreno del libro y el autor repartió autógrafos durante horas, no podía pasar desapercibida. Más aún que, según datos sociológicos, el 60 % de los estudiantes búlgaros del 6º grado lee sólo si hace falta, y el 30 % opina que la lectura es pérdida de tiempo. El primer libro de Emil ha salido en una tirada inicial de casi 26.000 ejemplares, impresionante cantidad para el mercado nacional. De ellos, 6000 ejemplares se agotaron como pan caliente antes del lanzamiento oficial de la obra en las librerías. Además, tan sólo en una semana, el libro entró en la lista de los 5 libros más vendidos en Bulgaria, situándose por delante de obras de autores como Paulo Coelho, Jorge Bucay, Elif Safak y Dan Brown.

¿Quién es Emil Conrad?

Un joven de 25 años, graduado en la prestigiosa especialidad de Relaciones Internacionales. Sin embargo, por lo visto no tiene intenciones de trabajar como diplomático, sino se ha dedicado a algo que le divierte y, al mismo tiempo, le trae ingresos. Desde hace algunos años Emil es vlogger, o sea, hace videos cortos en los que, de forma divertida, cuenta historias inspiradas en sus propias vivencias y en las de sus amigos. Para este fin se transforma en diferentes personajes, dirige y graba los videos y luego les hace el montaje. Hasta ahora tiene casi cien videos que difunde a través de las redes sociales y los canales YouТube и Vbox7. Por lo visto, Emil ha logrado encontrar temas que interesan a los adolescentes porque sus videos han provocado verdadero furor, y él se ha convertido en ídolo para ellos. Las chicas suspiran al ver sus ojos azules, como sus abuelas al ver a Alain Delon, y los chicos le consideran un modelo a seguir. En tres años sus videos en YouTube han sido vistos casi 10 millones de veces. Es impresionante también el número de seguidores del joven vlogger en Facebook, más de 213 000. Sus videos gozan de gran popularidad y múltiples comentarios.

¿Cómo ha pasado Emil Conrad del mundo virtual al real?

Después de su éxito en Internet, el joven ha decidido probar suerte en la vida real al publicar el libro “Las cosas que no nos enseñaron en la escuela”. De lo que no cabe duda es que la fama virtual le ha puesto un paso por delante de cualquier otro novato. Casi ningún otro escritor, prácticamente desconocido, hubiera encontrado con tanta facilidad a una editorial que publicara su obra, además en una primera tirada tan grande. En las páginas de su libro, Emil expone en primera persona doce relatos dedicados a temas como la eterna competición, las mentiras, el miedo, las drogas, las notas en la escuela... Lo mismo que con sus videos, en el libro Emil Conrad provoca a los lectores a ser activos. Con tal fin, el último capítulo del libro, el número 13, lo ha dejado como campo de expresión de los lectores. Cada uno puede finalizar el libro, enviar su propuesta y la mejor será incluida en la siguiente edición. Como todo joven, Emil es amante de las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías. Por esta razón cuatro de las ilustraciones en el libro contienen códigos QR que llevan al lector a unos videos cortos.

Las reacciones después del estreno del libro han sido contradictorias. El libro es comparado con un “ensayo a nivel de escuela secundaria” y “breve colección de consejos”, y al éxito de Emil algunos se refieren como a un milagro que durará un par de días. También hay partidarios y defensores de la obra de Emil como, por ejemplo, el escritor Kalin Terziiski. Según él, las críticas vienen de gente amargada y sin éxito. Quizás la verdad esté por el medio. Para Emil seguramente será bueno seguir uno de los consejos de su libro: “¡No se tomen en serio a sí mismos!”.

Versión en español por Ruslana Valtcheva