Durante la semana saliente, el presidente Rosen Plévneliev visitó Georgia. Ha sido la primera visita en 15 años de un Jefe de Estado búlgaro a aquel país.

Los mensajes intercambiados durante la visita mostraron que el apoyo de Bulgaria para la integración europea y euro-atlántica del país caucásico no ha cambiado, independientemente de los cambios en el poder en Sofía. En su reunión con el presidente georgiano Guiorgui Margvelashvili, Rosen Plévneliev confirmó rotundamente que Bulgaria apoya la soberanía y la integridad territorial de Georgia y precisó que ”Bulgaria no reconoce los llamados acuerdos entre la Federación Rusa y Abjasia y Osetia del Sur, que socavan los esfuerzos internacionales para estabilizar la situación en la región”.

Respecto a los acuerdos en cuestión, a principios de este año el Ministerio de Exteriores de Bulgaria declaró que violan la soberanía y la integridad territorial de Georgia y recordó que el país no ha reconocido las nuevas formaciones cuasi-estatales ni los resultados de las elecciones celebradas allí. En esencia, Sofía declara su apoyo a la soberanía de Georgia, con diferentes matices y grados de explicitud, desde 2008 no sólo en plano bilateral sino también en el marco del llamado Nuevo Grupo de Amigos de Georgia creado antes de los acontecimientos que llevaron al conflicto armado entre Rusia y Georgia. Cuando Moscú cesó la operación militar en Georgia el entonces primer ministro de Bulgaria, Serguey Staníshev, celebró este paso y propuso una solución dеl conflicto a través del diálogo político con la mediación de la UE del que Sofia podía ser anfitrión.

En Tiflis, el presidente Plévneliev expresó su apoyo no sólo por la integración euro-atlántica de Georgia sino además por su integración europea. Tal apoyo Sofía declaraba también durante la administración del Gobierno de Plamen Oresharski, creado con el mandato del Partido Socialista Búlgaro. En 2014, en una sesión de la Comisión OTAN-Georgia el entonces ministro de Exteriores Kristián Viguenin celebró el compromiso del gobierno georgiano con la integración en la OTAN. Viguenin lanzó un mensaje similar también durante una visita a Georgia, y meses más tarde festejó, asimismo, la rúbrica del acuerdo de asociación del país caucásico con la UE.

La evaluación del presidente Guiorgui Margvelashvili, dada al final de la visita del presidente Plévneliev, de que este apoyo es ”estable y sistemático”, testimonia también que el apoyo búlgaro a Georgia es invariable a pesar de los cambios de gobierno en Sofía. Por eso tanto Sofía como Tiflis esperan que la visita traiga no algún cambio sino ulterior desarrollo y consolidación de las relaciones políticas y económicas bilaterales.

Versión en español por Daniela Radíchkova