Antaño cientos de peregrinos transitaban a pie por un sendero a través de la majestuosa montaña de Rila para llegar al santo claustro del monasterio de Rila, acercarse a su energía y arrodillarse ante las reliquias del milagroso San Juan de Rila. Actualmente existe aún el camino pero como ruta turística que pasa por el Lago Seco (Sújoto esero), que en ocasiones desaparece.

Desde el monasterio de Rila hasta la Pradera de Cirilo (Kírilova polana) el sendero discurre paralelo al camino que lleva a la tumba y la cueva donde vivió el ermitaño Iván Rilski, o sea San Juan de Rila, patrono celestial de Bulgaria, tras lo cual llega a la Pradera de Cirilo.

Desde el prado se abren un panorama espectacular a los picos Eleni (Ciervos), Orlovets (que en español significaría “aguilero”), Dvuglav (Bícefalo), Iglata (La Aguja) y Zlía Zab. Desde este último –cuyo nombre significa “el diente malvado”– desciende hasta la pradera un canal aterrador y casi vertical, llamado Los Torrentes Malvados (Zlite pototsi), mientras que el pico Iglata es uno de los más inexpugnables del monte Rila. La Pradera de Cirilo es el punto de partida para ir a las cabañas Lagos de Peces (Ríbni esera) y Alfarero (Granchar), y también al pico Musala.

La siguiente ruta va al Lago Seco y la reserva forestal de Kobílino (Kobílino bránishte), y conduce hacia la cabaña Malóvitsa y el homónimo pico en la montaña Rila. Por ese trayecto circulaban tanto los peregrinos como las caravanas de caballos de carga.

Después de la Pradera de Cirilo, el sendero cruza por el bosque de hayas, casi directo hacia Zlía Zab, y va ganando altitud. A continuación dobla a la derecha en diagonal, tras lo cual empieza a zigzaguear. En uno de los virajes, tras un bosque de abetos blancos aparece el majestuoso pico Zlía Zab, cuya pared vertical se caracteriza por "su ceño fruncido". A lo lejos, en el fondo del valle, se vislumbra el monasterio de Rila.

Tras algunos pinos centenarios medio arrancados por las tormentas, el sendero prosigue casi horizontalmente hacia la derecha, atravesando ríos de piedra. Talladas en una roca se pueden ver la inscripción "Bienvenidos, visitantes del monasterio" y una cruz.

La ruta de los peregrinos partía del valle del río Beli Ískar y conectaba la vertiente norte de la montaña Rila con el monasterio de Rila. Por ella pasaban también los fieles antes de que hubiera vía férrea y líneas de autobús.

El sendero sube pronto hacia arriba, tras lo cual se vuelve menos desigual, y de repente, como un espejismo, abajo aparece el lago.

El prado delante del mismo está salpicado de miles de flores blancas, rojas y moradas. A la izquierda del lago desciende una escarpada ladera rocosa, y al fondo se ve el paso de montaña de la reserva forestal de Kobílino.

El Lago Seco se encuentra a 1.928 metros sobre el nivel del mar, ocupa una superficie de cerca de 2 hectáreas y está situado en un valle glaciar. Es un lago cerrado (sin salida para el agua), y se alimenta de la nieve que se funde en las laderas escarpadas del valle, de la corriente de agua de la reserva forestal de Kobílino y de los lagos Popovokapski. A veces, durante el verano el lago se seca por completo y desaparece, de ahí su nombre de Lago Seco.

El camino desde la Pradera de Cirilo hasta el Lago Seco se puede recorrer en dos horas. La mayoría de los turistas regresa tras un descanso en la orilla del precioso lago, en tanto que otros continúan hacia la reserva forestal de Kobílino y el pico Malóvitsa.

Por BGNES

Versión en español por Marta Ros