Los servicios nacionales  para  la  verificación de los recursos  europeos  utilizados por el país han detectado deficiencias  en  el trabajo  de las instituciones gobernantes. Se expresa lo anterior  en  un informe del Tribunal  de Cuentas  europeo. Se ha establecido que algunos servicios  han clasificado de modo incorrecto  riesgos específicos  de fraudes  calificándolos  de bajos y no han incorporado a  ellos procedimientos  adicionales de control. En Bulgaria  el órgano  auditor ha comprobado riesgos  de fraude y ha  emprendido  actuaciones adecuadas para  enmendar la situación. Por consiguiente, todo el sistema  ha  funcionado de forma coordinada con vistas a  garantizar  medidas más fiables en la lucha antifraudes, agrega el informe. El documento pone de  relieve que en un 60% de los  casos  verificados  de sospechas de fraudes ha habido rechazo o suspensión por parte de los órganos  búlgaros.