El pasado fin de semana ha sido el último de la campaña electoral para los eurodiputados búlgaros del 26 de mayo. El partido gobernante GERB celebró su evento principal en Sofía con la participación del candidato a presidente de la Comisión Europea Manfred Weber, del Partido Popular Europeo. Asegurando que Weber puede contar con el apoyo seguro de los eurodiputados de GERB y la Unión de Fuerzas Democráticas, el Primer Ministro Borisov destacó que Sofía espera apoyo de la CE para obtener ayudas del Fondo de Cohesión, la construcción de un centro de gas en territorio búlgaro y la aceptación de Bulgaria en el espacio Schengen.

En sus recientes apariciones entre los votantes, el Partido Socialista búlgaro (BSP) no faltó al tono agresivo hacia los gobernantes. Elena Yoncheva, líder de la lista electoral del PSP por Bulgaria, dijo en Kazanlak que GERB está vendiendo a Bulgaria mientras que la líder de BSP, Kornelia Ninova, afirmó que el único objetivo del primer ministro Borisov es quedarse hasta la elección del próximo Fiscal General para poder asegurarse impunidad después de ello.

El equipo del Movimiento por los Derechos y Libertades (DPS) para las elecciones europeas ha visitado al presidente honorario del movimiento, Ahmed Dogan, que en los últimos años apenas se deja ver en eventos públicos. El presidente de DPS, Mustafa Karaday, ha instado a los votantes a unirse el 26 de mayo como lo hicieron hace 30 años cuando salieron a protestar.

La alianza electoral “Bulgaria Democrática” argumenta que la batalla de las elecciones del 26 de mayo no es por uno, dos ni tres eurodiputados de esta coalición, sino por asegurar una alternativa al modelo bipolar de GERB y el Partido Socialista Búlgaro (BSP) con el DPS en medio.

Una encuesta sociológica realizada por “Barometer Bulgaria” muestra que GERB, el Partido Socialista (PSB), el Movimiento por los Derechos y Libertades (DPS), y la Organización Revolucionaria Interior Macedonia – Movimiento Nacional Búlgaro (VMRO-BND) son los partidos con más posibilidades de enviar eurodiputados al Parlamento Europeo. Sin embargo,  hay un alto porcentaje de votantes indecisos que podrían influir en el resultado del día de las elecciones. A la pregunta "¿Votará en las elecciones al Parlamento Europeo el 26 de mayo?", el 33.8% afirma que votará, el 36.5% duda y el 29.7% declara que no votará.

Versión en español por Marta Ros