En ocho puntos de control fronterizo en Bulgaria, las autoridades ya proceden a verificar si los conductores han recibido sus actas de infracciones electrónicas y han pagado sus multas. En presencia de documentos no entregados, se hace entrega de los mismos, y en caso de deudas impagas, se exige su pago. En caso de negarse el conductor a pagarlas, se le confisca el carné de conducir y el automóvil, si es propiedad del infractor, se detiene de circulación. Estos conductores podrán abandonar el país o ingresar a Bulgaria sólo como pasajeros o como peatones, ha señalado la Policía de Fronteras.