En un análisis conjunto, el Instituto de Macroeconomía de Dusseldorf, el Instituto de Economía de Austria (WITW) y el instituto francés OFCE exhortan a invertir los miles de millones de euros que la Unión Europea emplearía en la recuperación de la crisis por Covid–19 en dos proyectos clave. El primero se refiere a un ferrocarril de alta velocidad paneuropeo que enlazaría a todas las capitales europeas, y el segundo trata de la Ruta Europea de la Seda desde Moscú hasta los países del Cáucaso. Ambos proyectos presentan tramos importantes vía Bulgaria. Así, 853 kilómetros del tren ultra rápido (Ultra–Rapid–Train) o expreso transeuropeo (Trans Europa Express) deberían cruzar por Bulgaria, siendo el coste del tramo en este país del orden de un 59% de su PIB actual. El total de los 18.250 kilómetros en la UE costarían 1,1 trillones de euros.