Suman casi un centenar las localidades y parajes de Italia respecto a los cuales se asegura que podrían tener origen búlgaro. El grueso se encuentra situado al sur de Roma y la localidad más conocida es Celle di Bulgheria en la provincia de Salerno. Resulta curioso que la población local se autodefina con orgullo como “descendientes de búlgaros”. ¿Quiénes son esas gentes y cuál es el hilo que las une a Bulgaria? Va en pos de la respuesta a este interrogante el nuevo documental, titulado Alcek y los búlgaros en la Italia medieval, estrenado el 10 de septiembre pasado.
“El motivo para rodar esta cinta ha sido la presencia de dos necrópolis interesantes en Campochiaro, un pequeño pueblo del sur de Italia. Los arqueólogos se toparon con estas necrópolis a finales de los 80 del siglo XX −dice Ivo Ivanov, guionista del documental y periodista de Radio Bulgaria− . Durante las excavaciones arqueológicas, sorprendiendo a todos, emergieron en Campochiaro tumbas en las que habían sido sepultados guerreros, junto con sus caballos y luciendo todo su equipamiento para combates. Se puede decir con una seguridad del 99% de que esas tumbas guardan relación con la presencia de los protobúlgaros en Italia. Y es ahí donde comienza todo el enigma.
Algunos estudiosos de la historia asocian las raíces búlgaras de los nativos de la región con Alcek, de quien se presume que fue hermano del khan Asparuj. Según estos científicos, poco antes de que Asparuj fundara el Primer Estado Búlgaro en el año 681, Alcek se asentaba en las tierras del Reino Longobardo.
”Habría querido el destino que a comienzos del siglo VII aquellos búlgaros se encontraran en la Región Molise. Se les empleaba como mercenarios −explica Ivo Ivanov− . El documental versa sobre cómo habían llegado a parar allá. De hecho, no habrían tenido una suerte leve. Se asentaron en el territorio de la actual Italia como refugiados ya que habían huido del Jaganato ávaro. Fueron sometidos a persecuciones en el Estado de los francos en Baviera y así acabaron siendo aliados de los longobardos. Éstos les mandaron al frente a combatir contra Bizancio, porque en aquella época los longobardos y los bizantinos se enfrentaban en combates librados en el sur de Italia”.
El documental Alcek y los búlgaros en la Italia medieval lleva al espectador a la pequeña localidad Cello di Bulgheria, en el centro de la cual se yergue el monumento a Alcek.
”Allá hemos conocido personas muy interesantes que sienten un gran apego no sólo por su lugar natal, sino también por la vecina montaña Bulgheria –prosigue Ivo Ivanov–. Los lugareños guardan el recuerdo de las leyendas sobre los búlgaros que allá vivieran. Sin embargo, es muy probable que aquellos antepasados nuestros se hubieran asentado en esa zona antes de que lo hiciera Alcek. Se supone que en la época de las guerras góticas vivieron allá búlgaros que serían reclutados como mercenarios en las tropas de Belisario. Todo aquello representa una intrincada maraña de hechos en el tiempo”.
Ya en la década de 1940, el historiador y profesor italiano Vincenzo D’ Amico informaba que más de 700 asentamientos en los Apeninos habrían sido fundados por protobúlgaros. Ivo Ivanov, a su vez, cuenta cómo hace más de 30 años había llegado a toparse con las obras del estudioso italiano en la Biblioteca Nacional de Sofía.
”El Dr. D´Amico es médico y una personalidad de espíritu renacentista de múltiples inquietudes. Ha hecho asimismo estudios demográficos de las regiones italianas. Se sintió motivado para acometer sus estudios cuando, al hacerles preguntas a sus pacientes que acudían a consultarlo de las aldeas vecinas, procurando saber de dónde ellos venían, la gente solía decirle: ”Somos descendientes de los búlgaros”. Fue aquello lo que avivó el interés del Dr. D´Amico por este hilo histórico. Hay un hecho material interesante que hemos recogido en nuestra cinta, y es el Museo de los Trajes Tradicionales en Molise. Quienes vean este documental podrán comprobar la existencia de trajes excepcionales que sobrevivieron hasta comienzos del siglo XX, en los cuales se nota con nitidez la presencia de los rasgos de la indumentaria tradicional del folclore búlgaro”, concluye diciendo Ivo Ivanov.
Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: mfa.bg, Ivo Ivanov
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