Siguiendo la tradición para este primer día del nuevo año, en la mañana de hoy, los kúker de la ciudad de Razlog, Bulgaria del Suroeste, salieron a espantar los malos espíritus con sus temibles máscaras y danzas, transmite la agencia de noticias BGNES.

Redoble de tambor y sonido de cencerros despertó muy de mañana a los habitantes de la ciudad. Puesto que este año el festival de las máscaras fue suspendido, los kúker decidieron respetar la tradición, pero observando las medidas de seguridad, por lo cual recorrieron las calles, mientras los ciudadanos los aplaudían desde ventanas y balcones.

La pandemia de Covid-19 suspendió los también tradicionales festivales y juegos rituales parecidos que se vienen celebrando desde hace años no solo en Razlog, sino también en las vecinas ciudades de Bansko, Simitlí, Petrich y Blagoevgrad.