Representantes de la Agrupación de Establecimientos de Restauración de Bulgaria y la Asociación de Restauradores han bloqueado por un breve período de tiempo, en señal de protesta, una encrucijada clave de la capital, Sofía, luego de lo cual se han dirigido al Ministerio de Sanidad. Las dos organizaciones están insistiendo en un nuevo plan para hacer frente a la crisis en relación con la nueva ola pandémica que se avecina, sin cierres ni reducción del horario de los establecimientos y, en caso de reducción del aforo, que el Estado pague un extra por los asientos inutilizables.

En Plovdiv, la segunda mayor ciudad de Bulgaria después de la capital, más de un centenar de empleados en la industria también han bloqueado un cruce importante durante una hora. Según los manifestantes, la atención debería centrarse en una campaña llamando a la población a vacunarse, en lugar de cerrar negocios.

También se ha celebrado una manifestación en la ciudad portuaria de Burgás, que ha bloqueado una intersección a la salida de la urbe, pero los manifestantes han sido dispersados ​​por la Policía.