La autopista Tracia, que conecta la capital búlgara, Sofía, con la ciudad de Burgás (en la costa del mar Negro) se encuentra en estado crítico y según todos los requisitos de seguridad, debería estar cerrada al tráfico, según ha comentado en una entrevista con Radio Nacional de Bulgaria Bogdan Milchev, del Instituto de Seguridad Vial, una ONG experta independiente. Milchev ha aducido como ejemplo el tramo entre las ciudades de Ijtiman y Plovdiv, donde en más de medio centenar de lugares la barandilla está rota. “La falta de mantenimiento convierte esta autopista en una amenaza mortal”, ha afirmado el experto.