Vodítsi (en español, "festividad del agua"; el vocablo derivado de vodá, la palabra búlgara por agua), es el día que precede la gran fiesta ortodoxa Epifanía. Este día en los templos búlgaros se oficia una misa de consagración del agua. La liturgia se oficia solamente dos veces al año.
La tradición se remonta al siglo V. Se cree que el agua santificada en Epifanía es curativa, por esto los creyentes la llevan a sus hogares para poder utilizarla durante todo el año. Esta fiesta cierra el ciclo de “los días sucios” que comienzan en Navidad. Se llaman “sucios” los días en los que Jesucristo todavía no había recibido el santo bautismo.
El 5 de enero la Iglesia decreta un ayuno riguroso con motivo de la gran festividad.
76 años después de su muerte, el primer zar búlgaro del Tercer Reino Búlgaro, Fernando I, ha regresado a casa, al Palacio de Vrana, con lo cual se ha cumplido su última voluntad. En su testimonio señaló que deseaba estar enterrado precisamente en el..
Desde Tutrakan, el 30 de mayo ha comenzado la 39ª marcha bajo el lema de "Siguendo el camino de la compañía del voivoda Tanyo". El evento transcurre bajo los auspicios del presidente Rumen Radev. Se ha realizado la tradicional reconstrucción del..
En la tradición eclesiástica milenaria de Bulgaria, los feligreses siempre han recibido al nuevo sacerdote u obispo clamando “Digno”. De este modo ellos muestran su respeto, con la esperanza de que el nuevo clérigo guíe con sabiduría a los creyentes..
La Europa cristiana está viva y los intentos de descristianizarla y deshumanizarla no tendrán éxito, según la posición del Santo Sínodo de la Iglesia..