Los trabajadores del sector de la construcción búlgaro afrontan graves dificultades por el déficit de materiales básicos para su labor en las bolsas del país. Actualmente existe una escasez acuciante de acero y todos sus derivados y la causa de ello reside en la guerra en Ucrania. Lo ha señalado así en Radio Nacional de Bulgaria Plamen Mijalev, presidente de la representación regional en Stara Zagora de la Cámara de Constructores. Mijalev señaló que después del 24 de febrero, fecha que marcó el comienzo de la guerra en Ucrania, todas las bolsas en Bulgaria dejaron de vender esta materia prima, puesto que las importaciones de la misma procedían precisamente de Ucrania y Rusia.

“Todo lo relacionado con este metal brilla ahora por su ausencia, no se comercializa, no hay precios tampoco. Uno no tiene dónde comprarlo, así son las cosas”, resume Mijalev.

Los problemas asociados al costo de los materiales en el sector de la construcción se iniciaron ya a finales de 2021, cuando se produjo un encarecimiento abrupto, debido al alza de los precios del gas y la corriente eléctrica. Con la guerra en Ucrania el problema se ha ahondando y si al comienzo todo tenía que ver con un precio, ahora ya se nota un déficit de materiales fundamentales para la construcción. Faltan en estos momentos el acero con todos sus derivados como son las hojalatas, los perfiles, las cabillas:

“Una buena parte de la materia prima que se importa proviene precisamente de Rusia. Si no se importa como producción terminada, llega en forma de material, en formas semielaboradas para su fabricación y los suministros, en realidad, han cesado - señala Plamen Mijalev-. También han cerrado sus puertas las plantas fabricantes de acero en Bulgaria, y lo que tenían en existencias los comerciantes lo han vendido. Hace un par de días se hizo la venta de una pequeña cantidad de cabillas, el precio del material crudo ha llegado a unos 1.050 euros, tras haber sido el 23 de febrero de unos 750 euros:

“Respecto a Turquía, país del que importamos una parte de las materias primas, que yo sepa, también allá se han agotado las cantidades y el gobierno de ese país ha resuelto suspender la exportación - dice Mijalev-. El problema incluso afecta a los aceros que llegaban de Europa, puesto que una gran parte de la materia prima procedía de Ucrania y de Rusia. Ahora el problema se relaciona con los metales, pero no hay que olvidar que también se han desbocado todos los demás precios. El hormigón, por ejemplo, se ha encarecido un 20%, en lo que va de año. Teniendo en cuenta los precios del gas y de la luz, y es que en Bulgaria las plantas suelen emplear el gas como combustible no habrá manera de un abaratamiento de los materiales si esos precios se disparen más”.

Este representante del sector de la Construcción reconoce que la incertidumbre le asusta puesto que ni siquiera un cese próximo de las hostilidades sería capaz de garantizar la reanudación de los suministros de materias primas. Plamen Mijalev expresa que, por el momento, una buena parte de las obras en construcción se suelen finalizar por inercia, pero parte de las compañías han restringido las ventas y los inversores se mantienen reacios a acometer nuevas obras. Tampoco cabe descartar quiebras.

El problema es global y su impacto se seguirá percibiendo durante meses, concluye, categórico, Plamen Mijalev, presidente de la representación regional en Stara Zagora de la Cámara de Constructores, entrevistado por Radio Nacional de Bulgaria.

Adaptado por Elena Karkalánova

Versión en español por Mijail Mijailov