En la central hidroeléctrica reversible estatal de Chaíra, durante un testeo de una de las turbinas, que acaban de ser reparadas, se ha producido un fuerte golpe de ariete que ha destruido la instalación. Los daños son irreversibles y será difícil ser reparados. A causa de los enormes daños probablemente será necesario construir las instalaciones de nuevo. Los especialistas señalan como una causa del accidente la falta de simulaciones informáticas adecuadas y el cumplimiento deficiente de las obras de reparación. Durante una rueda de prensa exclusiva en el Consejo de Ministros el titular de Energía ha señalado que en estos momentos se está llevando a cabo una inspección y se esclarecen las causas que provocaron la avería.