Con un peregrinaje a la cantera de piedra, en la que estaba el campo de concentración “Slanchev Briag”, en las afueras de la ciudad de Lovech y una  misa fúnebre se rendirá hoy homenaje a la memoria de las víctimas del terror comunista. El campo de la muerte “Slanchev  Briag” fue creado tras  quedar cerrado el de Bélene y existió desde 1959 hasta 1962. En la cadera de piedra en las inmediaciones de Lovech, sin juicio ni condenas fueron asesinados decenas de adversarios del régimen comunista, y otros muchos murieron a consecuencia del trabajo agotador, las privaciones y las torturas. ”Se trata de una de las páginas más trágicas de la historia de Bulgaria, y nosotros la tenemos que recordar, no olvidarla y sacar las enseñanzas de ella. A las víctimas hay que recordarlas y respetarlas “, ha manifestado Gueorgui Mitev, presidente  de la organización en Lovech de la Unión de Fuerzas Democráticas, CDC, partido organizador de esta manifestación.