"El veto del presidente a ayudar a Ucrania con vehículos blindados de transporte de tropas se superará inmediatamente, así que no veo sobre qué comentar", declaró el primer ministro Nikolay Denkov en Shumen, donde participó en un debate de la comunidad académica sobre el futuro de la enseñanza superior.

El presidente de la Asamblea Nacional, Rosen Zhelyazkov, también expresó una opinión similar: "La Constitución define claramente los objetivos de la política exterior y uno de ellos es el establecimiento de un orden internacional justo, por lo que la posición de Bulgaria sobre la guerra de Ucrania es coherente. Existe la mayoría necesaria que superará el veto del presidente".

"El presidente Rumen Radev ha demostrado una vez más una posición inadecuada para un jefe de Estado de un país de la UE y la OTAN", es la posición del GERB. El partido afirma que la mayoría parlamentaria mantiene una política euroatlántica coherente en apoyo del derecho de Ucrania a defender a sus ciudadanos y territorios.

Según el presidente del grupo parlamentario del Movimiento por Derechos y Libertades, Delyan Peevski, la decisión del jefe del Estado puede definirse en una palabra: "vergüenza", por lo que los diputados deberían anular el veto esta semana y confirmar su apoyo a Ucrania y al pueblo ucraniano.

Para Continuamos con el Cambio - Bulgaria Democrática el veto es una hipocresía política. En cuanto al argumento de Rumen Radev de que el material militar puede ser utilizado por "Protección Civil", el diputado Ivaylo Mirchev dijo: "Espero que el presidente no quiera volver a aquellos tiempos en que se utilizaban las maquinas blindadas contra los ciudadanos búlgaros que protestaban."

El Partido Socialista Búlgaro (BSP) apoyará el veto de Rumen Radev, según declaró su líder, Kornelia Ninova. "Los motivos del presidente coinciden casi totalmente con nuestras declaraciones desde la tribuna parlamentaria. Esta ha sido nuestra posición desde el principio y lo seguirá siendo hasta el final", añadió ella.