"Estoy orgulloso de ver a tantos búlgaros patriotas en Shipka, en el día de nuestra Fiesta Nacional. Aquí, en esta cima coronada de eternidad, la hazaña de los revolucionarios búlgaros, junto a los soldados del ejército del emperador ruso Alejandro II, abrió el camino a la libertad de Bulgaria".

Así se expresó el presidente Rumen Radev en su discurso en el pico Shipka con motivo de la fiesta nacional. "Este año, como todos sabemos, es diferente de los demás, y por eso estoy aquí para daros las gracias por haberos unido y por proteger así nuestra fiesta nacional de la usurpación. La luz de vuestra conciencia pura ha disipado la densa niebla política de las cumbres del pasado de Bulgaria", añadió Radev. 

"No hay otro lugar que encarne tan simbólicamente el orgullo nacional, el ideal nacional, la valentía de los búlgaros de sacrificar sus vidas por la liberación de nuestra patria. Este pico, esta alta cima, son las Termópilas búlgaras, esta cima limpia la vergüenza de la frente de Bulgaria", declaró también en el pico Shipka el presidente de la Asamblea Nacional, Rosen Zhelyazkov quien, a diferencia del presidente Radev, fue abucheado por la multitud.

• Las celebraciones de la fiesta nacional de Bulgaria comienzan en Kazanlak