Las elecciones al Parlamento Europeo del 9 de junio de 2024 transcurrieron sin grandes turbulencias para las principales formaciones políticas. El Partido Popular Europeo y los socialistas siguen en cabeza y es probable que continúen con las políticas que han trazado.

En cuanto a Bulgaria, según los datos del censo paralelo de Gallup International Balkan, socio de BNR en la cobertura del voto 2 en 1, seis partidos búlgaros entran en el Parlamento Europeo, entre ellos por primera vez el partido nacionalista Renacimiento, que se disputa la segunda posición con Continuamos con el Cambio - Bulgaria Democrática.

En palabras del analista político Daniel Stefanov, en el nuevo Parlamento Europeo habrá un grupo más fuerte de extrema derecha, pero de nuevo habrá una mayoría de partidos moderados para elegir al presidente de la Comisión Europea. En este sentido, los eurodiputados búlgaros deberían tener una "mirada bruselense", por mucho que esto pueda ser motivo de burla en Bulgaria.

"Necesitamos personas que hablen un idioma extranjero, que vayan bien vestidas, que tengan buen aspecto, para que puedan ser percibidas positivamente por los demás eurodiputados, porque un eurodiputado solo no puede hacer nada", declaró Daniel Stefanov a BNR Varna. "Tiene que tener una buena posición en su propio grupo y ser bien percibido para tener la oportunidad de influir en diferentes legislaciones. También debe tener buenos contactos con los demás grupos moderados que probablemente formarán la próxima mayoría en el Parlamento Europeo. Una persona que no tiene experiencia, que piensa que Europa es algo malo y que el Parlamento Europeo es una institución que solo gasta dinero y desprecia el consenso moderado no puede ser escuchada. Necesitamos personas que formen parte del consenso moderado para poder influir allí en las decisiones que nos importan."

Según Daniel Stefanov, lo más importante para los búlgaros es crear un gobierno estable, que participe en la construcción de la política europea y defienda así la posición búlgara. Similar es la opinión del escritor Vladimir Zarev, que desarrolla la idea de la unidad en aras del bien común: la espiritualidad.

"La clase política búlgara está obligada a encontrar alguna forma de unidad en una idea común, feliz y prometedora, que traiga futuro a la nación", declaró el escritor a BNR. Por ejemplo, la cultura y la espiritualidad son las cosas que unen, no las que dividen. Esta idea salvífica debe ser universal, y tanto si un partido está en el Gobierno como en la oposición, debe cumplir los compromisos que ya ha contraído con esta idea. Es la única manera de unir al pueblo, de hacer volver a quienes se fueron y de dar al pueblo un sentimiento de justicia.

En cuanto al futuro de Bulgaria en la Unión Europea, el escritor se muestra firme:

"Me gustaría que Bulgaria fuera un país independiente dentro de la Unión Europea, capaz de defender sus propios intereses y no estar subordinada a embajadas y funcionarios europeos. Un país donde todos nos sintiéramos como personas decentes, al igual que los húngaros. Ser gente decente significa defender nuestros intereses por encima de todo. Y me gustaría que la Unión Europea volviera a la idea de que está compuesta por Estados independientes, en lugar de ser dirigida por un grupo de burócratas preocupados por sí mismos y sus intereses personales."

Texto de Darina Grigorova / basado en entrevistas de Valeri Velikov, BNR-Varna y Lyudmila Zhelezova de BNR-Horizon

Traducido y publicado por Borislav Todorov