El búlgaro empieza a creer en la economía, y la confianza de los consumidores aumenta. Los datos del Insitito Nacional de Estadística (INE) de enero 2014 muestran que la actitud de los ciudadanos búlgaros hacia la situación económica en el país durante el último año, así como sus expectativas sobre el presente son cada vez menos negativas. Se reduce el pesimismo de los búlgaros en cuanto a la situación financiera de los hogares en nuestro país. A pesar de ellos, de los datos del INE es evidente que la mayor parte de los consumidores continúan valorando la situación económica en el país como desfavorable para ahorrar. Los búlgaros opinan que en los últimos doce meses hay aumento de los precios al consumidor, pero a un ritmo menor. Los datos sociológicos muestran que la población no espera que de la inflación en el país crezca. En cuanto al desempleo, los encuestados opinan que durante el año en curso las tendencias se mantendrán y se observará una significativa reducción de la tasa de desempleo en Bulgaria. Otra prueba de que el optimismo entre los búlgaros aumenta es el hecho de que cada vez más compatriotas nuestros planean empezar a comprar bienes duraderos. Los inversores también recuperan su confianza en la economía búlgara. Lo demuestra el crecimiento de las inversiones de capital que se observa principalmente en la industria automovilística, en los servicios empresariales y en el transporte, sectores en los que Bulgaria está entre los países con un aumento de las inversiones extranjeras directas.