Se llama Marcel Fens y es un fotógrafo holandés freelancer que lleva siete años viviendo en Bulgaria. El motivo de nuestra reunión es un álbum de fotografías suyas  que fue editado no hace mucho por la fundación Cuatro Patas, con el apoyo del ex defensor del pueblo, Konstantin Penchev. El álbum se titula Los Bellos Perros sin Hogar de Sofía y todas las fotos que lo integran son una donación que Marcel hizo a la ONG. El fotógrafo comenzó a fotografiar perros callejeros en la primavera de 2013, sin tener un plan concreto de acción. Hace poco se dio cuenta de que necesitaba un enfoque más sistemático y por esto la capital resultó dividida en regiones. Hasta el mes de agosto de 2015 el holandés ya contaba con las fotos de 1019 diferentes perros y de 401 gatos.

Esto me da pie para preguntarlo qué es lo que ve en los ojos de estos animales mientras dirige el foco de su cámara hacia ellos. Marcel responde que lo que ve es únicamente miedo y no importa la nacionalidad del perro, ya que los sin hogar por todo el mundo ven al fotógrafo frente a ellos del mismo modo, como un extraterrestre armado de un aparato extraño. El fotógrafo se ríe a la pregunta de si ha elegido apostar en los perros porque los gatos son más rápidos y más difíciles de captar. Resulta que tiene suficientes fotos para otra edición en que presente gatos.

¿Cuál es el mensaje que envía Marcel mediante su trabajo?

Lo que quiero mostrar con mis fotos es que, en su mayor parte, los perros callejeros fueron abandonados, dice el fotógrafo. Eran mascotas que lamentablemente fueron echadas a la calle. Estos animales continúan comportándose como mascotas y son muy bellos. Quiero mostrar su buen lado y dar alternativa a su comportamiento que a veces espanta a las personas y se convierte en motivo de ruido mediático.

Marcel reconoce que ha sido objeto de ataques por parte de sus modelos pero nunca ha sido mordido. En Bulgaria lo atacaron dos perros a la vez pero él logró apaciguarlos, hacerlos acostarse y fotografiarlos. Tuvo su experiencia más estresante en Grecia, cuando fue agredido por cuatro perros que perseguían a un gato y después atacaron a la persona más próxima que se encontraba por allí y que era Marcel. Se salvó gracias a su impresionante estatura y su voz fuerte y profunda. A la pregunta de si existe semejante problema en su patria Holanda, reconoce que allí no ha visto un gato o un perro callejero, pero en Ámsterdam hay un enorme número de papagayos sin hogar. Nadie sabe desde dónde aparecieron y por qué escogieron precisamente la capital, pero su presencia es permanente. 

Para Marcel Fens el problema con la población callejera de los perros y los gatos en Bulgaria tiene una solución única y ésta ya ha sido encontrada, la castración. A su juicio, las cifras de la estadística de los últimos años confirman su tesis en absoluto.

He aquí lo que contó el holandés sobre el voluntariado en Bulgaria.

En primer lugar está la oficina de Cuatro Patas en Sofía. Yo tomo fotos que ellos utilizan en su actividad, en su sitio web o en ediciones como Los Bellos Perros sin Hogar de Sofía. Después vienen los animales del zoo de Sofía, ellos deben ser cuidados y trato de ayudar en esto con mis fotos. Incluso en estos momentos hay una muestra que fue montada allí, está dedicada al personal del zoo y a su vínculo con los animales. A finales de marzo, la muestra será exhibida en el Museo Nacional de Ciencias Naturales.

Marcel se niega a responder a la pregunta de cuál es su lugar favorito para tomar fotos en el planeta. Ha visitado 67 países, ha estado varias veces en el norte de África y en Kenia, ha fotografiado elefantes en su entorno natural, pero para él cada lugar posee su encanto específico. Dentro de dos semanas el fotógrafo se encaminará a la India con la esperanza de “cazar” a un tigre. La causa de regresar a Sofí , donde vive desde hace 7 años, es su bella esposa que es búlgara.