Hace unos días el consorcio austríaco Kapsch Traffic Solutions ha ganado un contrato público para construir en Bulgaria un sistema de cobro electrónico de peaje que estará basado en la distancia, para los vehículos de más de 3.5 toneladas, y en el tiempo, para los automóviles. El período de ejecución es de 19 meses y, luego de introducir este sistema, las viñetas (una pegatina especial pegada en la luna delantera de los vehículos) serán reemplazadas por viñetas electrónicas.

Recientemente, el ministro búlgaro de Transporte, Ivaylo Moskovski, ha señalado que es de gran importancia construir el nuevo sistema de cobro de peaje ya que éste es parte del plan general de estabilización y sostenibilidad del transporte, y que se espera que los ingresos generados por de sistema de peaje vial asciendan a 500 millones de euros anuales. Esto garantizaría un buen mantenimiento de la infraestructura vial del país. Los profesionales del transporte por carretera, empero, temen que el nuevo sistema ejerza una gran carga financiera sobre su sector y cause quiebras de pequeñas empresas.

No nos oponemos al sistema de peaje electrónico pero se debe implementar con prudencia como ocurre en otros países europeos, dice en una entrevista a Radio Bulgaria Koycho Rúsev, presidente de la Cámara Nacional de Transporte. En sus palabras, en Europa el sistema de pago electrónico cubre un 15% de la red de carreteras, principalmente autopistas y carreteras de primera clase.

Aquí al principio se hablaba que el nuevo sistema de peaje cubriría el 50% de la red vial del país, y hace unos días trascendió que cubriría aproximadamente el 80%, lo cual es injusto –prosigue Koycho Rusev– . El argumento que de esta manera haríamos que los vehículos de tránsito paguen una tarifa justa de entre 70 y 100 euros por cruzar el país es una mera excusa que no resolverá el problema. El número de vehículos de carga extranjeros que cruzan Bulgaria diariamente oscila entre 800 y 1.000, esto hace unos 300.000 vehículos por año. Supongamos ahora que a cada vehículo extranjero que cruza Bulgaria se le cobran 100 euros; el ingreso total obtenido de los impuestos de peaje ascenderá a 30 millones de euros por año. Quienes insisten en implementar el sistema de cobro de peaje de tal envergadura pronostican que los ingresos esperados superarán los 500 millones de euros por año. Si de estos 500 millones restamos 100 millones de ingresos de viñetas y 30 millones de vehículos de tránsitos, los restantes 370 millones se recaudarán del tráfico de carga que atiende la economía del país.

Rusev estima que el nuevo sistema de peaje electrónico afectará a todas las empresas transportistas nacionales y, sobre todo, a las pequeñas empresas.

Según el Ministro de Transportes de Bulgaria, el nuevo sistema de peaje electrónico garantizará una distribución equitativa de la carga entre el transporte por agua, el ferroviario y por carretera y el aéreo. ¿Qué quiere decir esto? Significa que los gastos de los transportistas viales aumentarán, lo que haría que las empresas elijan los demás tipos de transporte. ¿Es justo elevar la carga financiera de sólo un tipo de transporte? En este país ya existe un déficit de carga y luego las quiebras serán inevitables.

Koycho Rusev estima, además, que las autoridades no han hecho lo suficiente para eliminar la competencia desleal.

Las empresas que no forman parte de la economía gris se encontrarán en una situación muy difícil tras la introducción de los nuevos impuestos de carretera. Si el problema principal es hacer que los vehículos extranjeros que transitan Bulgaria paguen más, hay otras formas de recaudar dinero. En mi opinión, sería más justo encontrar una solución en el marco del impuesto especial, porque el combustible gastado ofrece mejor información sobre cómo se usa la red vial. Los vehículos de carga usan mayor cantidad de combustible y los vehículos ligeros, menos. En la accisa se podría incluir un impuesto adicional, aunque actualmente casi 30 centavos de euro por litro se destinan al tesoro público en forma de impuestos especiales.

Según Koycho Rusev, si, después de introducir el nuevo sistema de peaje, los vehículos de carga tienen que pagar 100 euros por 350 a 400 kilómetros, sus gastos aumentarán en 25 centavos de euro por kilómetro.

En otras palabras, para hacer la ruta de Sofía a la costa del mar Negro y de vuelta, cada vehículo de carga tendrá que pagar 200 euros adicionales, lo cual es una carga onerosa para cada transportista. Hay que mantener un dialogo serio sobre este tema y, luego de un análisis detallado, acordar un precio razonable concluye diciendo Koycho Rusev.