La semana pasada el Palacio Nacional de Cultura de Sofía fue escenario de una conferencia de los ministros del Interior y de Justicia de los países de la UE. Participaron en el foro Věra Jourová, comisaria europea de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género y Dimitris Avramópoulos, comisario europeo de Migración, Asuntos Internos y Ciudadanía. Durante los debates en el marco de dos días fueron abordados una serie de temas que interesan e inquietan a todos los ciudadanos europeos, entre ellos la reforma del sistema europeo de asilo y migración, y la seguridad de los ciudadanos.

Valentin Radev, ministro búlgaro del Interior señala, en lo tocante a la reforma en el sistema europeo común de asilo, lo siguiente:

Nosotros proponemos una reforma del reglamento de Dublín. Hasta ahora se han celebrado numerosas reuniones sin una decisión concreta pero debemos tomar alguna decisión a este respecto hasta finales de junio de 2018. Examinamos lo que nos propone la CE, el reglamento párrafo por párrafo. No pretendemos fijarnos en lo que nos divide ni seguir repitiendo lo que se ha hecho hasta ahora, sino que queremos encontrar una solución que compartan todos los países miembros de la UE. Hay, desde luego, algunos países a los que deberemos persuadir durante la Presidencia búlgara del Consejo de la UE de que su respaldo es importante.

El ministro búlgaro ha subrayado además que existe un progreso notable en limitar la presión migratoria desde Turquía hacia Bulgaria, por los buenos contactos entre el primer ministro de Bulgaria, Boiko Borisov, y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. El ministro ha hecho recordar que en 2015 el número de migrantes en Bulgaria procedentes del vecino país del sur ascendía a unos 90 mil, y que en 2017, se había reducido a apenas 9 mil.

Según el comisario europeo Avramópoulos, la reforma es de importancia clave para la comunidad, ya que debe frustrar las posibilidades de movimiento de los refugiados en el ámbito comunitario, regular el número de los refugiados a reubicar en cada país miembro y vigilar esta reubicación. Amvramópoulos considera inadmisible la renuencia de algunos países miembros a acoger a refugiados en su territorio.

La segunda jornada de la conferencia fue dedicada a un debate en torno a la creación de la Fiscalía Europea y el Reglamento “Bruselas II A” que regulará pleitos transfronterizos sobre los derechos de patria potestad y reforzará la política europea común en los casos de tráfico internacional de menores.

En lo que hace a la futura Fiscalía Europea cabe decir que se espera que la misma tenga un presupuesto propio en los próximos meses. Este órgano se ocupará de fraudes con fondos presupuestarios de la UE y se volverá operativo hasta finales del año 2020.

Durante la reunión en Sofía entre Tsetska Tsacheva y la comisaria europea de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género, Vera Jourova, fueron abordados el caso del Convenio de Estambul y las reacciones diametralmente opuestas que está provocando en el seno de la sociedad búlgara la posible ratificación de este documento por el Parlamento de Bulgaria. Según Jourova, quienes vacilan o se opongan al documento deben acabar dándose cuenta de que de lo que se trata en el Convenio de Estambul es de una prevención de la violencia, de una persecución judicial más eficiente contra quienes cometen tales actos de violencia y de una protección de las víctimas.

La comisaria europea ha expresado encontrarse dispuesta a conversar con diputados búlgaros en torno a este tema y ha expresado esperanza de que el documento, con todo, será ratificado.

Mientras tanto, tras conversar el pasado miércoles el primer ministro búlgaro, Boiko Borisov, con los socios de coalición de los patriotas Unidos, ha quedado decidido posponer la ratificación del Convenio y celebrar antes un debate público para convencer a la sociedad de que la ratificación es la decisión más correcta.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: BGNES