¿Buscáis un lugar interesante para pasear y descansar el fin de semana? A 80 kilómetros de Sofía, situada en el regazo de Stara Planiná, la ciudad de Etropole os contará su historia de 2.500 años, que data de los siglos V-VI a.C. Una de las versiones del actual nombre de la ciudad es que viene de la palabra tracia “etr”, que significa agua. En los siglos XVI-XVII empezó en la región la extracción de cobre, oro y plata, lo que contribuyó al desarrollo de numerosos oficios relacionados con trabajar el metal. En el mismo período surgió la Escuela Literaria y Artística de Etropole, de la que hasta hoy se conservan 76 tomos manuscritos de valor incalculable. Entre 1820 y 1830 en esta ciudad de montaña se construyó uno de los primeros edificios del país adaptado para albergar en un mismo lugar un colegio para niños y niñas. Durante el Renacimiento se restauraron numerosas iglesias. En 1882, maestros canteros de Bratsigovo reconstruyeron el templo más antiguo de Etropole, “San Jorge Victorioso”, destruido durante una de las incursiones otomanas en 1837. En vísperas de la Liberación, los ciudadanos de Etropole participaron en diversos grupos y organizaciones revolucionarias, y en 1870 Vasil Levski fundó ahí uno de sus comités revolucionarios.