Ocho niños con talento escuchan cada semana los consejos de su tutor. Y aunque sus sueños siguen un camino distinto, uno los une: mejorar cada día la vocación para la que nacieron.

Hace diez años que la asociación “Operación Oso de Peluche” alegra con regalos navideños a los niños que Diado Koleda (Santa Claus) no visita. Pero como estos niños no existen sólo durante las fiestas, la organización se ha impuesto un nuevo objetivo: buscar a los más dotados y darles un futuro. Así nació el programa de tutoría “Los talentos ocultos de Bulgaria”, que ha empezado este curso escolar, y en el que participan ocho niños de Sofía, Varna, Vidin y Burgás.

Este es el primer año del programa, cuyo objetivo es ayudar a niños sin padres o de familias pobres a desarrollar su gran talento, explica Mijaela Stoykova, fundadora de “Operación Oso de Peluche”. Nosotros proporcionamos a los niños clases particulares y tutorías individuales, participación en seminarios, talleres y concursos, acceso a los materiales necesarios y reuniones motivadoras con famosos. 

Galin, de 16 años, vive en el hogar de transición “Neofit Rilski” en Gorna Bania, y estudia Diseño Gráfico. Dibuja con la mano izquierda, como su ídolo Miguel Ángel, y con trazos seguros recrea las partes del cuerpo humano sobre un folio blanco. También se inspira en otros pintores renacentistas, Leonardo y Rafaello, y aunque se desarrolla excepcionalmente bien, aún duda entre si continuar en la Academia Nacional de Arte o en la Academia Nacional de Teatro y Artes Cinematográficas “Krastyo Sarafov”. Por ahora simplemente sueña con dedicarse algún día al cine y la animación 3D.

El joven que pinta tiene diversos talentos: quiere ponerse a prueba en muchas esferas y dilucidar cuál es la suya exactamente, dice de Galin Mijaela Stoykova. De momento, sin embargo, desarrollamos su talento como artista. Galin también toca el piano, hace beatboxing, y además quiere tocar la guitarra y cantar. Actualmente con su tutor de dibujo trabaja en el cuerpo humano y el profesor está extremadamente contento con su progreso y con la forma en que desarrolla su técnica.

Para avanzar no sólo en el campo en el que han elegido perfeccionarse, sino también en la vida, los niños reciben cada semana instrucciones de su tutor.

El papel de los tutores es entrevistarse cada semana con los niños para ayudarles a desarrollar sus habilidades para socializar, comunicarse, luchar con dificultades, resolver problemas, ejercitar el pensamiento crítico…, explica Mijaela Stoykova. En general, que se comuniquen y que traben amistad para facilitar su trabajo con los niños. Por otro lado, recibimos información sobre si los alumnos están contentos, cuáles son sus sueños, si se desarrollan con rapidez. Y como el enfoque debe ser individual y serio, entrenamos personalmente a los tutores antes de mandarlos a trabajar con los niños.

Los ocho niños del programa de este año han sido seleccionados con ayuda de los directores de los hogares en instituciones sociales. Desarrollan sus talentos en el ámbito de la música, del arte y del deporte. La asociación afirma que hará todo lo posible para que los niños con mayor potencial, seriedad y deseos de trabajar puedan seguir sus estudios y entren en instituciones de educación superior.

La “Operación Oso de Peluche” necesita 80.000 levas anuales (unos 40.000 euros) para desarrollar el talento de 10 niños. Hasta ahora han estado obteniendo financiación de patrocinadores y donantes, cuya confianza se ganan mediante su campaña navideña “Obsequia un regalo a un niño”. Pronto tendrá lugar la recaudación de fondos para el segundo año de programa dedicado a niños con talento sin posibilidades financieras.

Versión en español por Marta Ros