La Presidencia búlgara del Consejo de la UE ha abordado su recta final y va llegando el momento para hacer un recuento de lo que se ha logrado en estos seis meses. En el transcurso de la semana que hoy empieza iremos ofreciendo varios materiales presentando distintos puntos de vista del politólogo Yisef Dakak, del dirigente de la misión de la CE en Sofía, Ognyan Zlatev, como también una encuesta que recoge opiniones de ciudadanos búlgaros.

Yusef Dakak, politólogo del Instituto de Política de Derechas, asigna a la presidencia búlgara del Consejo de la UE la calificación 5 (muy bueno) de la escala de 6 grados, vigente en Bulgaria. Según él, la política exterior de Bulgaria se encuentra en una fase especialmente activa que habría que mantener también después de que finalice el mes de junio.

La Europresidencia búlgara ha logrado dar el mentís a sus impugnadores al resultar ser una de las presidencias europeas más activas en los últimos años. Esta presidencia ha logrado tres éxitos importantes. Uno de éstos ha sido el haber restituido el diálogo entre Turquía y la UE, algo que revestía importancia clave para Bulgaria desde el punto de vista de la presión migratoria a lo largo de la frontera común entre Bulgaria y Turquía. El segundo éxito de peso se ha logrado en el tema sobre los Balcanes Occidentales. Bulgaria ha conseguido colocar a un nivel elevado el diálogo en torno al porvenir de esos países, roto en los últimos años y que los dejaba sin perspectiva alguna. Actualmente se ha vuelto a hablar de la fijación de una fecha para el comienzo de negociaciones con Macedonia, o sea que, se ha producido una animación realmente crucial. El tercer éxito importante ha tenido que ver con la reducción de las tasas por las comunicaciones telefónicas entre los países miembros de la UE y los Estados de los Balcanes Occidentales. Esto ha sido anunciado por la comisaria europea, María Gabriel, y reviste suma importancia con vistas a la conversión de Europa en un sistema integrado global.

Tras la cumbre en Sofía del pasado 17 de mayo trascendió que desde este verano se puede esperar un proceso de reducción de las tasas a pagar por conversaciones telefónicas y tráfico de datos móviles en itinerancia con Albania, Bosnia y Herzegovina. Macedonia, Montenegro, Serbia y Kosovo. Se trata de un adelanto especialmente importante para la Europresidencia búlgara en lo tocante a la aproximación a Europa de los Balcanes Occidentales. Han sido asimismo sendos éxitos para la región el Tratado de Buena Vecindad y el Acuerdo sobre el nombre de Macedonia en virtud de los cuales, Skopje ha dejado zanjados dos contenciosos que desde muchos años tenía con Bulgaria y Grecia, respectivamente. La adhesión de pleno derecho a la familia europea sigue siendo, sin embargo, bastante distante para los vecinos países al oeste de Bulgaria, los cuales también necesitan del apoyo de los subsiguientes países presidentes del Consejo de la UE como son Austria, Rumanía y Finlandia. Hasta el momento Austria ha confirmado que la integración de los países de los Balcanes Occidentales seguirá siendo una prioridad al menos hasta finales de 2018. Yusef Dakan lo considera correcto porque:

Austria es uno de los países que mejor conocen esta región por haber formado ella durante décadas parte del Imperio Austro-Húngaro, y tiene un interés máximo en la integración europea de esos países. Desde luego, esto no debe ocurrir a cualquier precio porque una parte de esos Estados no se ajustan aún a los criterios para la adhesión. Son sendos ejemplos de tales tanto Bosnia y Herzegovina como Serbia, país este último que continua conculcando en gran medida los derechos de la minoría búlgara en su territorio. Hay multitud de problemas institucionales, sobre todo en Bosnia y Herzegovina, que no parece un estado unitario. Serbia, por su parte, sigue intentando desunir a aquélla por medio de la llamada República Srpska. Serbia, además del problema que tiene pendiente de resolver con Bosnia y Herzegovina debe solventar los que tiene con Kosovo.

A pesar de todo, para mantenernos completamente objetivos, no podemos quedarnos impasibles ante algunas deficiencias que han acompañado la Presidencia búlgara del Consejo de la UE. Una de ellas, a juicio de Yusef Dakar, ha sido la escasa resistencia que la parte búlgara ha opuesto al llamado Paquete de Movilidad, propuesto por el presidente francés, Emmanuel Macron, y relativo a los pagos a los trabajadores desplazados en el ámbito de la UE. El politólogo considera que las propuestas del presidente galo hacen que aumente la brecha entre las regiones en la UE, implementándose unas medidas por medio de las cuales, el presidente se empeña en cobrar popularidad en Francia. A pesar de que este paso de Macron resulta comprensible de cara a su afán de obtener una mayor credibilidad, tal acto infligirá daños enormes a la economía europea cuyas escalas aún se desconocen. Además de esto, una parte de los cambios propuestos en las directivas están violando dos de los principios fundacionales de la UE: el de la libre circulación de personas, bienes de consumo, servicios y capitales y el de la competitividad.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: Archivo