Los llamamientos a la unificación del pueblo búlgaro que atraen constantemente la atención del público se convierten con frecuencia en eslóganes en grandes pancartas en protestas contra la corrupción y la anarquía. Pero la palabra unificación no es solo para un día, para luego olvidarla cuando nos conviene, sino que es el primer paso para cambiar la realidad que nos rodea. Por lo tanto, no es casual que sea la base de la iniciativa de la asociación "Azbukari" para levantar un monumento al abuelo Dobri en la capital búlgara, Sofía. El objetivo es que se convierta en el primer monumento al bien en Bulgaria. ¿Por qué el símbolo es precisamente el llamado “santo de Baylovo"? Lo explica Borislav Radoslavov, uno de los seguidores que apoya la causa:

Podemos decir que Dios eligió al abuelo Dobri como su embajador, para que nos enseñara bondad, humildad, paciencia y arrepentimiento. Hace 5 años lo conocí en el patio de la iglesia en Baylovo, donde hablamos cerca de una hora sobre Fe, las oportunidades para ser mejores y cuándo rezar. Una de las cosas más importantes que aprendí de él es rezar también cuando todo va bien. El otro mensaje que se me quedó grabado fue hacer el bien sin esperar nada a cambio. Tarde o temprano ese bien volverá a mí de una forma u otra.

No se sabe mucho sobre la vida del abuelo Dobri, porque para él era suficiente ser conocido como el hombre bueno que recaudaba dinero para la restauración de templos y monasterios. Nacido en 1914 en el pueblo de Baylovo, cerca del bosque de Ihtiman, este hombre de gran corazón falleció el 13 de febrero de 2018, a los 104 años, y hasta su última hora vivió de acuerdo con sus principios y permanecerá en el corazón de la gente como un símbolo de abnegación en nombre de la fe.

El deseo de los impulsores de la iniciativa es que el monumento sea obra de los estudiantes de la escuela de escultura del pueblo de Kunino, en Vratsa, con la ayuda de su profesor, el escultor Krasimir Mitov. Éste ya ha preparado una maqueta de yeso como ejemplo, pero aún hay que debatir sobre ello y es probable que experimente algunos cambios. Sin embargo, seguramente el monumento será a tamaño real y tendrá alrededor de 1,70 metros de altura.

Ya se está hablando con el Ayuntamiento de Sofía sobre su posible ubicación, y la idea es que esté en la plaza que hay delante de la catedral Alexander Nevski.Los fondos necesarios para construirlo se van acumulando en una cuenta bancaria especial. Hasta ahora se han recaudado más de 3 000 BGN (1 500 €), y cualquier persona que desee donar a la causa puede hacerlo mediante la compra de un ejemplar del libro “Diado Dobri, el santo de Baylovo”. El autor, Borislav Radoslavov, recopila historias y recuerdos de parientes centenarios hasta ahora desconocidos por la sociedad. La razón era el compromiso de esos parientes de no compartir nada con nadie durante 20 años. El título del libro puede sonar exagerado o demasiado pomposo para algunos, pero pensemos en cuántas personas han dedicado toda su vida terrenal a colaborar en la restauración de algunas iglesias ortodoxas en Bulgaria de forma completamente desinteresada.

Con la ayuda de una mujer de Elin Pelin, el autor ha averiguado el número exacto de templos a los que Dobri donó fondos, así como las cantidades que recaudó. Su nombre es Tsonka Pantaleeva, y su papel era parecido al de tesorera: el anciano le entregaba el dinero recaudado durante el día y ella lo transfería después a su cuenta bancaria personal. Cuando Tsonka decidía que la suma acumulada era suficiente, la sacaba del banco y la donaba a una iglesia elegida por Dobri. Éste donaba las mayores cantidades a templos donde se conservan iconos milagrosos o reliquias de santos. Una de las donaciones, considerada el mayor donativo privado a la Iglesia, que ascendía a 35 700 BGN (17 850 €), la hizo al templo-monumento "San Alexander Nevski". Sin embargo, en realidad Diado Dobri donó mucho más. A menudo dejaba lo recaudado durante el día directamente en la caja de donativos del templo. En el libro se habla también de algunas grandes donaciones que hizo a un monasterio cerca de Ruse y al Bosque de la Cruz, así como a muchos otros templos más pequeños necesitados de restauración y mantenimiento en todo el país.

Versión en español por Marta Ros

Fotos: Archivo