Todos los sábados, los voluntarios de la Fundación Generaciones Juntas comparten su día libre con los moradores del asilo para personas mayores San Basilio de Plovdiv, en el centro sur de Bulgaria. Hablan con ellos, los llevan a pasear, a visitar eventos culturales, intercambian pensamientos, hasta comentan sus sueños. La abuela Taña, por ejemplo, sueña con tener un pequeño jardín de rosas, regarlas, acariciarlas, ponerles abono. Y en su imaginación ya ha hecho su anhelo realidad. Lo que necesita es un poco de ayuda: algunos pares de manos fuertes.
Durante nuestra visita más reciente, la abuela Taña dijo de forma espontánea y en broma que le gustaría que la ayudáramos a buscar jardineros voluntarios, sonrientes y enérgicos, que se ocuparan junto con ella del jardín de flores de la residencia – dice Margarita Gáncheva, presidenta de la Fundación– . No tardamos en fijar la fecha: el 22 de junio, sábado. Ya que la abuela Taña es la más familiarizada con la jardinería y cuida de las flores, ella aceptó de agrado dirigir la iniciativa.
¿De qué otra manera se les puede ayudar a las personas mayores para que se sientan más a gusto en su hogar común?
Cuando visitamos a los ancianos de la residencia, vemos el comedor donde desayunan, almuerzan y cenan. Es un recinto grande que necesita una reforma, así como mesas y sillas nuevas –comenta Margarita Gáncheva– . Además, cada una de las seis plantas del edificio dispone de una pequeña sala de estar con muebles bastante desgastados. Sería un lindo gesto que, en vez de deshacerse de los muebles que ya no necesita, la gente los regale a hogares como este. Cualquier mesita de café, estantes para colocar los libros, y también armarios serían bienvenidos.
Los ancianos que habitan en las residencias necesitan también de más actividades al aire libre. Especialmente en verano, con el clima bueno, no es recomendable que se queden encerrados entre las cuatro paredes.
Hemos llevado a los moradores de la residencia de San Basilio al teatro, al restaurante, a la pastelería –prosigue Margarita Gáncheva– . Algunos de ellos incluso sueñan con hacer una excursión a la montaña. De modo que no duden en invitar a los ancianos a dar un paseo, en llevarlos al teatro, al cine, a la pastelería o al parque, ellos saldrían con gusto.
Por su parte, durante estos paseos, los residentes de los hogares para personas mayores les contarán cómo era su vida antes o qué hacen ahora para matar el tiempo. Así, por ejemplo, la abuela Taña habla de sus hijos, de su antiguo trabajo de cocinera, pero también de sus reuniones regulares con los niños en un círculo infantil.
Somos unas tres o cuatro mujeres mayores que solemos ir a verlos –dice– . Les leemos libros, y para el Año Nuevo con sus manitas amasaron hogazas y nosotras las horneamos. Para la Pascua de Resurrección pintamos huevos, y en mayo despedimos a los niños del último año de parvulario que en septiembre empezarán a ir a la escuela.
Versión en española de Daniela Radíchkova
Fotos: Fundación Generaciones Juntas
La Embajada de Francia y еl Instituto Cultural Franc és reunieron a científicos que compartieran su experiencia en relación con los retos científicos en la Antártida y la lucha contra el cambio climático. Socios del evento eran el Instituto Polar..
Polémica en Croacia por el despliegue de tropas en la misión de la OTAN en apoyo de Ucrania El vicesecretario general de la OTAN, Boris Rugge, visitó Croacia para explicar a los legisladores locales los objetivos de la misión de..
El prócer de la ilustración es una personalidad muy especial en la historia búlgara ya que es portador de lo nuevo , señala el profesor asociado. Moris Fadel, doctor de las ciencias, director del Departamento de nueva bulgarística en la Nueva..
Más del 90% de los ciudadanos en la región de Taraklia y en la provincia autónoma de Gagauzia en la República de Moldavia votaron en contra en el..
La capital búlgara se ha despertado con una copiosa nevada y una gruesa capa de nieve. El aeropuerto de Sofía trabaja con normalidad en las..