El turismo es uno de los sectores que se han visto más afectados por la pandemia que de coronavirus que ha arrasado Bulgaria y del mundo durante el último año. Las medidas antiepidémicas y las consiguientes restricciones han provocado un desplome sin precedentes en las reservas de vacaciones. La prohibición de organizar excursiones dentro y fuera del país paraliza el trabajo de las agencias turísticas por al menos otros tres meses hasta finales de abril, y la falta de ingresos dificulta la indemnización de los clientes que han anulado sus reservas. 

“Hasta ahora, hay varias promesas en relación con la concesión de subvenciones en el marco de dos programas gubernamentales. Lamentablemente, los trámites son extremadamente lentos, y la única ayuda realmente obtenida hasta el momento equivale al 1% de la facturación para el año 2019 −explica Emil Abazov, gerente de una empresa turística, y agrega− : Esperamos recibir pronto otras subvenciones del Estado por una suma del 4% del volumen de negocios de las empresas turísticas, pero en la medida en que yo sepa, la financiación que se concede en el marco de los distintos programas se retrasa a menudo por meses. Si preguntaran a todos los compañeros, también dirán que queremos trabajar. Es la única la manera para hacer frente a esta crisis”

Los operadores turísticos son de la opinión que su única oportunidad de resarcir a una parte de sus clientes es precisamente el esperado 4% de la facturación para 2019. Sin embargo, para una parte considerable de las agencias, este porcentaje difícilmente sería suficiente para compensar un año de estancamiento de sus actividades. 

“El gran problema que yo veo es que tenemos que esperar primero tomar el dinero y solo entonces tenemos derecho a reembolsar a los clientes −comenta Emil Abazov− . Esto es sumamente extraño, ya que yo tengo una idea de la suma que recibiré y preferiría indemnizar ahora al menos a los primeros clientes que llevan casi un año esperando y no esperar la concesión de esta ayuda“.

Si bien paraliza el trabajo de algunos, la prohibición de organizar viajes turísticos en Bulgaria y en el extranjero, implementada por orden del ministro de Sanidad, no parece regir para otras empresas del sector. Al menos esta es la impresión que se obtiene al leer las numerosas ofertas de viajes publicadas en Internet. En un comentario sobre el tema, Nikolay Danaílov, gerente en el sector y miembro de la Unión de Turismo, destaca que estas ofertas son una evidente infracción de la prohibición ministerial ya que ofertan viajes turísticos en grupo.

“Para bien o para mal, como representante del sector, formé parte del equipo del Ministerio de Turismo que hace dos años armonizó la nueva ley de turismo con la directiva europea referente al turismo. Ésta señala de manera categórica que el viaje turístico es un viaje preparado de acuerdo con un programa con al menos dos servicios incluidos y combinados con anticipación, siendo los principales el transporte, el alojamiento y las comidas y los servicios adicionales, que incluyen diferentes atracciones, etc. Por lo tanto, no hay nada que debatir en este caso, ya que están presentes dos servicios: transporte y alojamiento”.

Todo operador turístico que organice vuelos chárter debe recibir el visto bueno de varias instituciones.

“Hay al menos cuatro instituciones responsables de la realización de un vuelo chárter −señala Nikolay Danaílov−. Lo más chocante es que todos estos viajes junto con el programa para el mes de febrero son ampliamente publicitados en los medios”.

A fin de cuentas, queda claro que la prohibición de organizar viajes turísticos es un obstáculo para una buena parte de los operadores turísticos, pero para otros es un beneficio.

Versión al español de Hristina Táseva 

Fotos: archivo, BNT, BGNES