Las terceras elecciones parlamentarias consecutivas en Bulgaria en lo que va de año ya han pasado a la historia. Han sido más distintas por haberse combinado con las elecciones ordinarias a presidente y vicepresidente de Bulgaria. Y mientras que el desenlace de las elecciones ordinarias se producirá en una segunda vuelta, ahora el resultado de las elecciones legislativas anticipadas ha colocado al país ante un nuevo quebradero de cabeza: ¿se podrá formar un Gobierno ordinario? ¿Qué horizonte tendrá su gestión?

Parvan Simeonov, sociólogo de la agencia Gallup International, está convencido que en esta ocasión se dan todas las premisas para un gobierno de coalición aunque se resiste a aventurar la perdurabilidad que éste tendría:

“Se nota que, una vez más, los partidos del cambio son os que disfruta de respaldo suficiente para poder, junto con el Partido Socialista Búlgaro, BSP, alumbrar alguna variante. Sin embargo, si no lo hacen me temo que en unas elecciones siguientes la participación pueda ser bajísima y se arribe a una radicalización del proceso político y a otros acontecimientos imprevisibles”.

Amén de los resultados envidiables del partido de los ex ministros interinos, Kiril Petkov y Asen Vasilev, la votación de los electores se ha traducido en un número importante de votos a favor de formaciones como el Movimiento por Derechos y Libertades (DPC), y la nacionalista Resurrección. DPC emergió de los comicios como primera fuerza política en el extranjero (38.65%), seguida del nuevo partido Continuamos con el Cambio (22.19%) y Hay tal Nación (10.96%).

El partido que había apostado por la retórica anti-pandémica y ha conseguido superar el umbral del 4% para acceder al Parlamento, Resurrección, obtuvo un respaldo serio por parte de los búlgaros residentes en el extranjero, un 6,20% y se situó inmediatamente después de la coalición GERB-CDC (8.01%) y la Alianza Bulgaria Democrática (7.97%) en el ordenamiento de los resultados de la votación en el extranjero, tras haberse procesado un 97,7% de los protocolos electorales.

Merece un análisis a fondo el interés de los búlgaros residentes en el extranjero por votar al DPC y a Resurrección:

“El Movimiento por Derechos y Libertades nos da dado pruebas de su capacidad, de la que en estos últimos tiempos nos habíamos olvidado - señala Simeonov-. Hemos sido testigos de una votación en masa en el territorio de otro país, algo que no pasó en julio, pese a haberse revocado la restricción sobre la apertura de colegios electorales en países al margen de la UE. Y encima esto ha ocurrido en un país que tiene tensadas sus relaciones con el mundo occidental. Lo más importante ahora es que DPC nos ha recordado su capacidad no simplemente a través de la votación en Turquía sino también por medio de la campaña que promovió de su candidato a presidente de Bulgaria. El Movimiento por Derechos y Libertades se movilizó en las condiciones de un asedio político en Bulgaria”.

El fenómeno del buen resultado obtenido por el partido Resurrección en la votación de los búlgaros en el extranjero tiene también su explicación lógica: la defraudación por el resto de formaciones surgidas como alternativas al statu quo:

“La primera alternativa de peso, en la persona de Slavi Trifonov y su formación Hay tal Nación, no prosperó. La Alianza Bulgaria Democrática se enfrentó a una competencia en la persona de Continuamos con el Cambio. En tales momentos crece el número de las formaciones secundarias. Tales partidos suelen emprender una estrategia contra todos, no participan en actuaciones colaboracionistas y eso contribuye a que su resultado siga aumentando. No en último lugar, Resurrección, es una de las formaciones de la protesta en Bulgaria y es completamente normal que los emigrantes económicos búlgaros en el extranjero prefieran respaldarla precisamente a ella”.

Como problema que irá cobrando cada vez mayor significación Parvan Simeonov ha señalado la tendencia que viene notándose desde hace años de los partidos políticos a despreciar el potencial de los votos de los búlgaros residentes en el extranjero y seguir negligentes en cuanto a su peso:

“Esto, en lo sucesivo, puede acabar teniendo bastante importancia, y la razón es que cada vez mayor número de búlgaros se van al extranjero, y los estamos necesitando, no nos queda más opción. Otro aspecto importante de la votación de los búlgaros en el extranjero es que precisamente estos votos pueden resultar decisivos al resultar precarios los resultados de alguno de los partidos. Esto significa que incluso lo poco que se haga por y en el seno de las comunidades de los búlgaros en el extranjero, podrá resultar gratificante para la respectiva formación que a este trabajo se dedique”.

Versión en español por Mijail Mijailov