Cuando una persona tiene un sueño no hay nada que pueda frenarla para cumplirlo. De joven Ina Nikolova soñaba con comprarse un Trabant, pintarlo de color rosa y recorrer Bulgaria a bordo de éste. 25 años más tarde, su sueño se ha hecho realidad. Dondequiera que aparezca el simpático automóvil que tiene el bello nombre de Hada de las Mariposas, siempre se convierte en una atracción.
“Durante un largo periodo no sabía qué nombre poner al Trabant. Comencé a decorar su parte exterior con pequeñas flores y mariposas y así se me ocurrió el nombre. El nombre tiene que ver con las mariposas porque yo misma soy de carácter ligero y positivo. Además, igual que a un hada, me gusta hacer magias y sorpresas para los demás. Mi coche y yo somos un todo”, dice Ina Nikolova.
Solo en diez meses el automóvil, que antes tenía un aspecto poco atractivo, fue transformado hasta el punto de ser irreconocible. El Trabant fue descompuesto y cada parte de éste fue restaurada y pintada de rosa, el color favorito de Ina porque ella es una persona “alegre, multicolor y capaz de provocar las sonrisas de los demás”. Absolutamente todo es de color rosa: incluso el líquido limpiaparabrisas. Le dan un encanto adicional las pestañas con las que están adornados los faros delanteros. Mientras conduce, a Ina la acompañan juguetes peludos, de color rosa, desde luego.
La propia Ina Nikolova también es una persona muy impresionante. Ejerce la profesión de contable, pero se siente como un hada. Siempre está de viaje y goza de la vida. Es sonriente y positiva pero a pesar de esto la propietaria de este automóvil encantador no ve al mundo a través de gafas de color rosa.
“Veo de color rosa pero mi punto de vista es muy realista, afirma Ina. Soy una persona común y corriente, lo que intento es darle más color a la vida. Hay momentos oscuros pero lo importante es que no olvidemos de sonreír”.
El Hada de las Mariposas trae emociones agradables a toda persona que se la encuentre por el camino y, además, es un invitado deseado en los desfiles de coches retro por toda Bulgaria. Participa en diferentes causas: ha transportado los tapones de plástico para el futuro, de la campaña homónima que se desarrolla en Bulgaria, ha regalado mártenitzas y huevos pascuales y ha buscado a Papá Noel. Dondequiera que vaya la gente la recibe con el corazón abierto.
“El automóvil agrada a las personas, todos dicen que es muy bello y multicolor. Me saludan, quieren tomarse una foto y viajar a su bordo y esto me alegra muchísimo. Me cargo de estas emociones positivas porque nunca he pensado que mi coche llegaría a ser tan popular”, reconoce Ina.
Ina es de las personas que nos motivan a mirar a la vida desde su lado divertido. ¿Es esta la manera de combatir el tedio del día a día?
“Sí, es una de las maneras porque si nosotros mismos no hacemos del mundo un lugar lleno de colores y no cumplimos nuestros sueños nadie lo hará por nosotros”, dice categórica Ina.
Ina pronto cumplirá otro de sus sueños: participar en la reunión internacional de los conductores de Trabant en Alemania:
“El evento tendrá lugar en la segunda mitad de junio. Entones organizaremos un grupo de automóviles trabant y viajaremos a Alemania. Mi mensaje a todos es soñar y hacer realidad sus sueños porque entonces uno se siente contento de sí mismo”.
Versión al español de Hristina Táseva
Fotos: archivo personal
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