Después de que el presidente Rumen Radev se negara a aprobar uno de los nombres de ministros propuestos por la candidata a primera ministra en funciones, Goritsa Grancharova-Kozhareva, Bulgaria se enfrenta de nuevo al desconcierto, en la búsqueda de una salida a lo que se ha convertido ya en una crisis política constante. Para el presidente el problema resultó ser la personalidad del ministro del Interior, Kalin Stoyanov, ya que, según sus propias palabras, no confía en que éste pueda garantizar unas elecciones honestas. Esta situación obligó a cancelar el juramento del cargo, así como a aplazar la fecha de las elecciones parlamentarias anticipadas. Nunca antes había sucedido que un presidente se negara a emitir un decreto nombrando un gabinete provisional, lo que plantea la cuestión de si esta crisis política podría convertirse en una crisis constitucional. Según la docente Natalia Kiselova, la crisis actual es solamente política:

"En realidad, presenciaremos la vuelta a la situación anterior, donde las competencias a la hora de formar gobierno provisional eran compartidas. Esto es precisamente lo que defendía parte de la antigua mayoría constitucional: que el presidente es el que debe tener la última palabra (y no el candidato a primer ministro en funciones) ", subrayó Kiselova.

Stefan Sofianski, ex primer ministro en funciones, quien fue también alcalde de Sofía durante años, se refirió igualmente al aspecto constitucional de este asunto. Sofianski insiste en que, tras los últimas modificaciones en la Constitución, no queda claro si el presidente tiene el derecho de negarse a firmar el decreto de nombramiento de un Gobierno provisional:

"Si al presidente no le gusta el próximo gabinete y tampoco el siguiente, entonces ¿qué hacemos? Esta inestabilidad, y la incertidumbre afectan al trabajo del Consejo de Ministros y a la administración que depende de él, porque si se llega al poder con unas prioridades, hay que intentar cumplirlas y ponerlas en práctica. El problema fundamental de Bulgaria es que la economía no va bien, por eso el principal debate que debe mantener la sociedad búlgara es cómo realizar el Plan de Recuperación y Sostenibilidad. Hemos tenido una crisis Covid, se han acumulado también crisis políticas, y todo esto está teniendo un efecto negativo sobre la economía, el turismo, etc. Cuando no se tiene la perspectiva de buscar soluciones a estos problemas, acabamos en una situación como en la que nos encontramos ahora, con estos cambios innumerables de gobierno, y sin tener un horizonte claro. Esto afecta a la vida cotidiana de todos los búlgaros".

La politóloga, Prof. Rumiana Kolarova también ha opinado sobre los temas que suscitó el día de ayer. Según ella, la negativa del presidente a firmar el decreto se encuentra dentro de sus competencias:

"El presidente tiene la autoridad de imponer un veto: en este caso, ha sido una especie de veto a la propuesta de la nominada a primera ministra, Goritsa Grancharova-Kozhareva. El empleo del veto es apropiado cuando la persona que lo utiliza tiene ante sí una opción para salir de la situación, pero no para bloquearla. Está claro que en estos momentos Bulgaria se encuentra en un tipo de crisis política, a la cual hay que encontrar una salida", señaló Kolarova, y añadió: "No estoy segura de que el presidente tenga claro qué tipo de salida quiere encontrar. Lo que ha anunciado públicamente no es una salida, sino el deseo de que el Parlamento forme una mayoría, algo para lo que la Asamblea Nacional no tiene, obviamente, ninguna posibilidad. Es más bien la declaración de una posibilidad que es muy poco probable".

¿Cuánto tiempo es posible aplazar las elecciones parlamentarias anticipadas? Esta es la pregunta que ha formulado la Radio Nacional de Bulgaria para pedir opinión a la veterana diputada y profesora de Derecho Constitucional, Ekaterina Mihailova:

“No hay una fecha límite, pero el país no puede seguir sumido en este caos”, responde firme Mihailova. “Yo confío en que la razón y la responsabilidad política tomarán finalmente los mandos. Me refiero a todos los representantes de las instituciones. Tomar las decisiones en una situación así, está en manos del presidente y del Parlamento. Así que les incito a que haya una nueva ronda de consultas, y además, en un futuro más bien próximo".

Autor: Yoan Kolev

Versión en español: Alena Markova

Fotos: BGNES, Iván Ruslanov