Bulgaria ha salido de un largo letargo político: 81 días después de las sextas elecciones anticipadas parlamentarias, la Asamblea Nacional ha elegido al 105º Gobierno búlgaro. 125 diputados apoyaron el gabinete de coalición, creado mediante un acuerdo entre tres de los ocho partidos políticos y coaliciones parlamentarias en el país: el GERB-SDS, el Partido Socialista Búglaro-Izquierda Unida (BSP-IU) y el Hay Tal Nación (ITN).

"Esta no es la configuración más deseable para el gobierno, pero cuenta con reservas. Dada la necesidad de actuar y trabajar por afianzar los sistemas de seguridad, el Estado, el Presupuesto; y de buscar la justicia, merece la pena hacer este esfuerzo", señala el eurodiputado Ilhan Kyuchyuk, del partido "Democracia por los Derechos y las Libertades-DPS".

El cambio en la Casa Blanca y los procesos en varios países europeos son una señal de los importantes cambios que están ocurriendo en el mundo, lo que refuerza la importancia de que Bulgaria tenga un gobierno regular, aunque basado en ciertas concesiones políticas.

"La diferencia entre lo que ocurre en Estados Unidos y en Europa es que allí hay partidos o personas con intereses comunes que han puesto su mirada en la misma dirección. Lo que se está construyendo aquí, está enfocado en cuatro direcciones, si no más, y no estoy seguro de cómo esto encajaría en situaciones en que haya que tomar decisiones rápidas, y tener unas prioridades claras", comenta ante BNR el analista político Emil Sokolov.

“El Gobierno está dominado por Delyan Peevski”, comenta el ex eurodiputado Petar Vitanov en relación con el papel de Peevski, líder de la cuarta fuerza parlamentaria DPS-Nuevo Comienzo, un político sancionado en virtud de la ley estadounidense "Magnitsky". “La oposición afirma que Peevski gobierna entre bastidores, mientras que otros en el Gobierno afirman lo contrario. No tienen nada que decir porque la presencia de Peevski les resulta desagradable a ellos y a sus votantes. Él está en la posición más ventajosa porque conserva sus palancas de poder".

El reparto de poder en Bulgaria parece aplazar cuestiones importantes como la aprobación del presupuesto para este año, la reforma en el sistema judicial, o las iniciativas legislativas relacionadas con el Plan de Recuperación y Desarrollo y la adhesión de Bulgaria a la zona euro. Un día después de la elección del gabinete, Boyko Brisov, el líder del GERB, primera fuerza política parlamentaria por mayoría, anunciaba que a partir del 21 de enero se procedería a efectuar los nombramientos de personal para la construcción del llamado segundo escalón del poder ejecutivo - viceministros y vicepresidentes, así como para el reparto de las comisiones en la Asamblea Nacional, de las que actualmente sólo funcionan dos. La asignación de puestos podría ser el primer escollo para la recién formada coalición y su capacidad para sobrevivir a un mandato completo de cuatro años. Pero hay más:

“La verdadera causa del conflicto no será la geopolítica, porque todas las partes son actualmente geopolíticamente flexibles”, pronostica Sokolov. “Como hemos dicho, las cosas están cambiando, la geopolítica se está quedando en segundo plano. Los intereses nacionales y la preservación de la economía y la industria nacionales, algo que es un importante acento en el caso de Trump, prevalecerán también en Bulgaria. El problema vendrá cuando salga a flote algún escándalo de corrupción, y empiecen a pasarse la patata caliente los unos a los otros. Y es que, será inevitable que se llegue a un escándalo de corrupción, por la sencilla razón de que los cuatro partidos están actualmente intentando hacer uso de algún recurso de poder para resolver controversias o para comprarse tranquilidad interna."

El psiquiatra y escritor Lyubomir Kanov se muestra escéptico sobre la durabilidad de este gabinete:

"Es útil que exista este nuevo gabinete, que se haya formado tras la prolongada fase de caos. Al menos hay un gobierno que asuma responsabilidades y un parlamento que apruebe leyes urgentes", declara Kanov en una entrevista para BNR, y añade: “Espero que funcione, pero tengo mis dudas dada su heterogeneidad. La cuestión es que no provoque demasiado caos y desorden".

“La larga espera para que los políticos se pusieran de acuerdo sobre una fórmula de gobierno nacionalmente responsable pareció agotar la inclinación a la tolerancia en los primeros días del nuevo gobierno. Es necesario observar con atención los pasos que irá dando la coalición gobernante, ya que los controvertidos nombramientos políticos van a suponer una postura firme en la oposición parlamentaria”, afirma el analista político Emil Sokolov. “Lo mismo cabe decir de las iniciativas legislativas, aunque de momento no hay una agenda clara en este sentido”.

Por otro lado, Svetlin Tachev menciona como posible aval para un gobierno más duradero otro hecho bien conocido por todos los partidos:

"Las elecciones conducen al desgaste y la erosión política. Dada la situación, un gobierno como éste rebajará temporalmente las tensiones públicas y facilitará que se estabilice el poder."

Autor: Yoan Kolev

Versión en español: Alena Markova

Fotos: BTA, ilhankyuchyuk.eu, Facebook /Emil Sokolov, Facebook/Petar Vitanov, BGNES, nmd.bg, archivo personal