Un verano más, los arqueólogos búlgaros tuvieron encuentros cercanos con vampiros. A inicios de septiembre, en el complejo arqueológico de Perperikón, en la parte oriental del macizo Ródope, el equipo del Prof. Nikolay Ovchárov encontró restos de un entierro inusual: de un hombre de 35 años de edad que había sido objeto de una serie de ritos paganos para evitar que se convirtiera en vampiro. Las monedas de bronce encontradas junto a los restos humanos fechan el entierro en la segunda mitad del siglo XIII.
En 2012, durante las excavaciones en el monasterio de los Santos Pedro y Pablo, en las inmediaciones de Veliko Tárnovo (Bulgaria del norte), fue hallada una necrópolis con restos de un hombre con extremidades remachadas al suelo con soportes de metal. La quinta abrazadera había sido colocada en el pecho. Sobre la tumba habían dejado brasas y trozos de pedernal. Según las creencias populares, el pedernal corta el vínculo vital entre la persona fallecida y los vivos. El llamado vampiro encontrado por el Prof. Ovchárov es similar al que fue excavado en 2012. Lo que los dos tenían en común era una reja de arado clavada en el área de la clavícula.
“Quien haya leído la novela Drácula, de Bram Stoker, o haya visto la película homónima de Francis Ford Coppola sabe lo que le sucedió. La tierra de origen de Drácula es Transilvania; en realidad, es el príncipe valaco Vlad Tepes, que vivió en el siglo XV. Estamos conscientes de que todo el mundo está obsesionado con los vampiros. Creo que podríamos utilizar este tema, sin exagerar, por supuesto, para mostrar que en las tierras búlgaras, efectivamente, había algunas costumbres extrañas que son de particular interés para el público occidental”, dijo el destacado arqueólogo en una rueda de prensa señalando, además, el gran interés de los medios de comunicación extranjeros en el tema de los “vampiros” hallados en Bulgaria.
“Fue interesante que en la conferencia de prensa después de las excavaciones, el 4 de septiembre, todos los medios habían venido principalmente para ver y conocer más sobre el llamado vampiro a pesar de que habíamos encontrado también objetos de oro y otras piezas de valor –señaló el Prof. Ovchárov– . Luego recibí una llamada del rotativo británico Daily Telegraph: deseaban filmar un documental sobre los nuevos hallazgos. Poco después la misma oferta llegó de periodistas de The Independent, y unos días más tarde su equipo estaba en el sitio de las excavaciones. El 10 de septiembre de 2013 The Independent publicó un artículo de una página completa sobre el vampiro y los demás hallazgos arqueológicos hechos durante el verano en Bulgaria. Fue sólo el comienzo de una oleada de escritos sobre este tema. A finales de septiembre recibí una llamada de la revista estadounidense Time y a Bulgaria llegó la periodista Charlotte McDonald-Gibson. El artículo que escribió era sólo sobre los vampiros, se titulaba “Los cazadores de vampiros de Bulgaria” y fue publicado el 31 de octubre. En septiembre salió un artículo extenso también en el periódico británico Daily Mail. En un lapso de cinco días en varias ediciones británicas y estadounidenses salieron una serie de publicaciones detalladas, en papel y en línea, lo cual llevó en consecuencia a la reimpresión de materiales sobre la arqueología búlgara. Entre estos medios de comunicación están el Global Post, el Examiner y Fox News, pero también ediciones de las islas de Fiji, de Uganda, Nigeria e Indonesia. Hace unos días rodamos un documental para el segundo canal más grande de televisión nacional del Japón, Asaka, con una audiencia de unos 20 millones. El documental es de dos horas de duración y será exhibido este mes de diciembre con el título Los grandes fenómenos. Pone de relieve las prácticas anti-vampiros por estas tierras”.
Estas prácticas se llevaban a cabo por los familiares del fallecido y según las fuentes etnográficas en Bulgaria persistieron hasta finales del siglo XIX y principios del XX. Algunos de los ritos durante los entierros son, por ejemplo, incendiar la tumba, atar las extremidades del muerto, cubrirle con bloques de piedra. Estos enterramientos se remontan a la prehistoria pero parece que en la Edad Media eran más típicos de los Balcanes, explica Nikolay Ovchárov.
“En Bulgaria, la mayor concentración de este tipo de tumbas existe en las zonas montañosas y accidentadas, sobre todo en las montañas Ródope y Rila –aclara el arqueólogo– . Son lugares donde el cristianismo tuvo menor arraigo. Estos ritos se practicaban durante la dominación otomana, cuando en las tierras búlgaras el cristianismo adquirió un carácter “doméstico”. Hoy en día se observa una nueva ola vampírica a escala mundial. Tengo entendido que en los últimos años en el mercado aparecieron más de 50 libros sobre temas de vampiros. Son supersticiones que no se pueden tomar en serio. Por otra parte, tienen su valor para el turismo; la gente muestra interés en los horrores del pasado y hay que sacarle máximo provecho a la situación”, considera Nikolay Ovchárov.
Versión en español por Daniela Radíchkova
По публикацията работи: Vésela Krásteva
Последвайте ни и в
Google News Showcase, за да научите най-важното от деня!
