Cuando hablamos de huérfanos o niños en una situación de vulnerabilidad social, solemos demostrar una falsa preocupación y tratamos de cambiar de tema. Creeos que si algo similar no nos sucede a nosotros estos problemas no nos atañen mucho. Lo positivo es que esta tendencia comienza a cambiar. Un número cada vez mayor de búlgaros participa con donaciones propias en diferentes campañas benéficas dedicadas a distintas causas. Lo importante para estas personas es poder confiar que el dinero que donan será invertido en la solución de un problema concreto. La operación Osito afelpado es una de las iniciativas gracias a las cuales miles de niños de centros sociales reciben los regalos navideños que desean. La creadora de la campaña, Mijaela Stoikova, refiere más detalles acerca de la iniciativa:

La Operación Osito afelpado arrancó hace 9 años cuando yo estudiaba en una universidad en el extranjero. Me motivó una campaña similar denominada “El día de la caja de zapatos” en la cual la gente llenaba de regalos cajas de zapatos y las envía a África. Yo era parte de esta iniciativa y decidí que podíamos hacer algo similar en Bulgaria.

Durante el año pasado más de 7 mil niños de 330 instituciones en Bulgaria recibieron su regalo nuevo y un poco de atención por parte de los voluntarios que participan en la campaña gratuitamente. En 9 años Mijaela y su equipo han logrado recorrer todos los centros sociales para huérfanos y niños en una situación social desfavorable. ¿Cómo valoran los cuidados desplegados allí?:

Lamentablemente son muy reducidos los recursos y el presupuesto de este tipo de centros. Gracias a Dios, cuando se trata de niños con deficiencias físicas a algunos centros se han asignado sumas mayores. A mi juicio, en Burgas y en la región la base es muy buena y el número del personal es suficiente. Cuando se trata de instituciones para niños con deficiencias las cosas son más diferentes. Su presupuesto no es suficiente, el personal es escaso y siente dificultades con los cuidados durante todo el año. Además, es difícil encontrar cuadros que tengan la formación necesaria.

El problema con la escasez de cuadros en instituciones de este tipo es que estas personas no están motivadas para trabajar en los asilos. Su remuneración no se corresponde con las condiciones de trabajo y los esfuerzos que hacen para resolver los problemas de cada niño. A pesar de todo, este cuadro no ha desmotivado a Mijaela y a sus amigos de la tarea de ayudar a los niños a desarrollarse y cambiar su vida:

Este año iniciaremos un proyecto para el cual buscamos importante financiación e importantes socios. Se llama Los talentos secretos de Bulgaria y tiene por objetivo elegir cada año a 10 niños en situación social desfavorable que serán respaldados por nosotros con patrocinadores, lecciones privadas, visitas en seminarios, talleres, competiciones y materiales necesarios para el fomento de los talentos. La idea es que los niños sean apoyados durante todo el año y que puedan contar con equipos que les ayuden a desarrollarse en una determinada esfera. Al término del año debemos encontrarles un tipo de cooperación con una compañía determinada o con una persona privada que les apoye durante el próximo año.

Una iniciativa de este tipo sí pude cambiar el destino de muchos niños que poseen talento pero no tienen la posibilidad de mostrarlo. Con mayor frecuencia la causa es precisamente la falta de dinero que obliga a muchos de ellos a abandonar sus sueños. Si desean ayudarles pueden hacerlo en  http://plushenomeche.org/bg/. Es una inversión en un mejor futuro que los niños merecen.