Este año más de 50 científicas búlgaras han competido por una beca en el programa “Para Mujeres en la Ciencia”. Han ganado sólo tres de ellas, que se dedican a la investigación científica en el campo de las ciencias naturales. El programa nacional de becas se lleva implementando en Bulgaria desde 2010, en el marco de la colaboración internacional entre L'Oréal y la UNESCO. Forma parte de un programa global que existe en más de medio centenar de países de todo el mundo, y tiene como objetivo apoyar a mujeres jóvenes para quienes la ciencia es el futuro.

Cada una de las tres mujeres premiadas en el programa este año tiene la posibilidad y el potencial de hacer grandes avances en la ciencia. El campo científico de la Dra. Kirilka Mladenova es la bioquímica, más concretamente la investigación de una enzima específica de la retina. El de la Dra. Natalia Bujova es la física: ha desarrollado un material para un almacenamiento de datos más seguro y duradero en medios digitales. También se han depositado muchas esperanzas en el proyecto científico de la Dra. Izabela Guenova, relacionado con un sistema para obtener combustibles alternativos a partir de biomasa residual. El tema es de muy candente actualidad, y está relacionado con la solución de problemas globales por la necesidad cada vez mayor de recursos energéticos para la humanidad, por un lado, y la mayor contaminación del medio ambiente.

Mi consejo para todas las jóvenes que deseen dedicarse a la ciencia es que se armen de paciencia y que persigan sus sueños y sus objetivos, dice Izabela Guenova.

La sensación de recibir este reconocimiento es única. Este es un gran logro para mí y para mi trabajo, y me motiva a seguir investigando. Espero que otros jóvenes sigan mi ejemplo y se dediquen a la ciencia en Bulgaria. Por desgracia, cada vez más jóvenes se niegan a trabajar en este campo, pero espero que esto cambie pronto. Es clave asegurar los fondos necesarios, esto es muy importante para motivar a los jóvenes científicos.

Según datos de la UNESCO, actualmente sólo el 28 % de los investigadores del mundo son mujeres, y sólo un 3 % de los premios Nobel de la Ciencia se han otorgado a mujeres. Precisamente por esto, el programa “Para Mujeres en la Ciencia” pretende aumentar el número de mujeres científicas. Ya se han concedido becas a más de 2.700 mujeres de diversos campos científicos en más de 115 países, y 15 de ellas son búlgaras. Y este año el jurado, presidido por la Prof. Eliza Stefanova, de la Universidad de Sofía “San Clemente de Ohrid”, ha depositado grandes esperanzas en jóvenes investigadoras con un gran potencial científico para Bulgaria:

Los primeros años las candidatas a la beca eran un puñado, y actualmente son muchas. No porque las mujeres no pudieran, sino porque no se lo creían. Cuando tenemos ejemplos respaldados por otros, empezamos a creer más. Estoy agradecida tanto a las mujeres como a los hombres de nuestro jurado. En Bulgaria las mujeres científicas nunca se han sentido ignoradas ni distintas a sus compañeros de trabajo, pero esto no significa que no debamos apoyar a las jóvenes búlgaras, ante las cuales se presentan muchos retos para trabajar en ese complicado campo.

La directora general de la UNESCO, la búlgara Irina Bokova, ha mandado saludos a sus compatriotas científicas al no poder asistir a la ceremonia debido a que ese día transfería su cargo. Sois las jóvenes promesas científicas de Bulgaria y las mujeres científicas tienen el poder de cambiar el mundo, ha dicho Bokova en su discurso. Y añade:

A lo largo de los años, los búlgaros y las búlgaras han demostrado poseer algunas de las mentes más brillantes del panorama científico. Estos siete años en los que se ha celebrado el concurso en Bulgaria han puesto de manifiesto no sólo la necesidad de un concurso científico como este, sino también el enorme potencial de nuestro país, que debe ser alentado y estimulado por nuestra parte. Y hoy en día las mujeres de todo el mundo se enfrentan a estereotipos y barreras culturales y sociales que limitan su acceso a la educación y a la financiación de su labor investigadora. Esto obstaculiza el desarrollo de la carrera científica y el despliegue de todo su potencial y talento. Este es el único programa global creado para ayudar y alentar a las mujeres a dedicarse a la ciencia. Es parte de la lucha por la igualdad de género, y desde el inicio del programa dos de las becadas han ganado un premio Nobel.

Versión en español por Marta Ros