Antaño un destino vagamente popular, la parte más occidental de la Bulgaria del Oeste, ahí donde se recogen los pliegues de varias montañas bajas (Zavalska, Lubash, Ruy, Cherna Gora, Golo Bardo, Konyavska, etc.), se ha convertido en la última década en un auténtico descubrimiento para los turistas sedientos de bellezas naturales. Contribuye a popularizar ese rincón que conserva su virginidad la tradicional escalada internacional del monte Ruy, al pie del cual serpentea el río Erma, de asombrosa belleza. La subida termina en el punto más alto de la montaña, el pico Ruy (1706 metros). Precisamente por ahí pasa la frontera entre Bulgaria y su vecino del este, Serbia.

Este año es la 9ª edición de la escalada internacional tradicional del monte Ruy. El municipio de Tran participa en los preparativos del evento desde 2014, tras firmar un acuerdo conjunto con el municipio serbio de Babusnica, explica Evguenia Tákova, directora de la Dirección de Diseño territorial, Propiedad municipal y Política de inversión” del municipio de Tran.

La escalada, que este año tendrá lugar el 23 de junio, se realizará de forma paralela a ambos lados de la frontera, para que búlgaros y serbios se reúnan en la cumbre. Ya que es una región fronteriza, los participantes del evento deben dar previamente sus datos a las autoridades fronterizas: nombre y apellido y DNI, o apuntarse en una lista común elaborada por el municipio de Tran.

La idea es que escalar el monte Ruy se convierta en uno de los mayores eventos turísticos internacionales de los Balcanes, dice Evguenia Tákova. Suelen participar clubes de montaña de Bulgaria y de Serbia, así como gente de la República de Macedonia.

El municipio de Tran organiza la escalada búlgara desde el pueblo de Zabel, al pie del pico, que proporciona un servicio de autobuses desde Tran hasta el pueblo. Hay otras dos alternativas para llegar a la cima desde el lado búlgaro: una es desde el pueblo de Lomnitsa, donde la Asociación de Turismo de Tran se ocupa de la organización, y la otra, desde el pueblo de Zelenigrad, donde tradicionalmente se organizan los lugareños. Los turistas deben ir equipados con ropa adecuada para una caminata veraniega, agua y comida.

La ruta más larga, ligera y con las mejores vistas es desde el pueblo de Zabel. El camino desde Lomnitsa tiene pendientes más pronunciadas, aunque gran parte de la ruta pasa por el bosque, a través del río, y el ambiente es más fresco, algo importante en los calurosos días de verano.

En el lado serbio la subida del pico se ameniza con una espléndida celebración en el pueblo de Rakita, al pie de la montaña. Esto añade Evguenia Tákova:

Tradicionalmente suben a Ruy al menos 300 personas, y cuando el clima es mejor en la parte búlgara, pueden llegar a 500 o 600.

El trayecto es más rápido para los turistas más experimentados, que pueden completarlo en un par de horas, mientras que a un ritmo más lento, puede llevar entre dos horas y media o tres. Los participantes no necesitan ningún entrenamiento específico, pero es importante que estén preparados para una larga caminata, advierte Evguenia Tákova. En la cima no hay ningún evento organizado.

Normalmente los grupos que suben hasta la cima se hacen fotos juntos, y después regresan. En la cima suelen reunirse como mucho 200 personas.

Versión en español por Marta Ros
Fotos: Archivo personal